Frente a una derrota inesperada y más extensa de lo esperado a nivel nacional, La Cámpora buscó ayer consuelo en tres victorias municipales en el conurbano, donde había concentrado su empeño. Hurlingham, Lanús, y Quilmes fueron los lugares donde la agrupación kirchnerista se anotó triunfos, en medio de una debacle inesperada. Las victorias se erigieron como la contracara de los resultados de las listas generales y fueron, sobre todo, las batallas que la organización liderada por Máximo Kirchner había decidido dar en esta contienda electoral. Fue el epílogo de una campaña que tuvo a Cristina Kirchner y a su hijo corridos de los primeros planos.
“No hay ni euforia, ni clima de derrota. Vienen días de análisis y replanteos de estrategia electoral. Lo central es que mejore Unión por la Patria, no es que se está pensando a quién le fue mejor y a quién no”, juraban desde la agrupación. “La Cámpora está dentro de UP, no es que hubo un análisis segmentado”, completaban respecto de los resultados obtenidos en los distritos donde decidieron competir. A pesar de la derrota, la búsqueda de continuar con un patrón de “coralidad de voces” sigue en el espacio. La agrupación buscaba este lunes retomar fuerzas para encarar el tramo de las próximas 10 semanas de cara a las próximas elecciones.
Elecciones 2023 | La autopsia de una derrota dolorosa y la urgencia de una reinvención
La interna del municipio de Hurlingham era clave para la organización y finalmente, como esperaban, quedó en manos de Damián Selci, que se impuso sobre el actual intendente, Juan Zabaleta, a quien La Cámpora buscaba destronar en una batalla sin cuartel. Tal era así que inició la campaña con un acto en ese municipio, con la presencia de Máximo Kirchner, un sábado por la tarde. Fue una de las escasas apariciones del legislador. Selci ya había gobernado el municipio durante la licencia de Zabaleta para hacerse cargo del Ministerio de Desarrollo Socia. Las diferencias en los manejos fueron tan grandes que Zabaleta volvió abruptamente al municipio, en octubre de 2022, en medio de cruces y hasta denuncias.
En Lanús, La Cámpora se anotó el triunfo en la interna de Julián Álvarez, el exsecretario de Justicia en tiempos de Cristina Kirchner. Álvarez, que también representó al Poder Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura, ya había sido candidato en ese municipio, pero entonces perdió la contienda. Se alejó de la organización y pasó un tiempo viviendo en España. En la interna le ganó a Nicolás Russo, del Frente Renovador, y a otros dos candidatos. En octubre enfrentará a Diego Kravetz, mano derecha del intendente Néstor Grindetti, candidato a gobernador de Juntos por el Cambio. Kravetz supo integrar las filas de Alberto Fernández en la Capital Federal y ahora representa a Juntos por el Cambio. La semana pasada, su campaña sufrió el impacto del conmocionante crimen de Morena Domínguez, la nena de 11 años asesinada durante un asalto. El kirchnerismo le enrostraba que no vive en el distrito, algo que también hacen varios hombres de sus filas.
En Quilmes, La Cámpora no iba a internas, pero la proyección de Mayra Mendoza, quien ya gobierna el territorio desde 2019, superó a la suma de los dos candidatos de JxC, Martiniano Molina y Walter Queijeiro, y se encamina a la reelección en el estratégico distrito del sur del conurbano bonaerense. El cocinero, que fue intendente de Quilmes entre 2015 y 2019, se impuso sobre el periodista deportivo, que iba en la lista de Bullrich. Entre ambos sumaron casi 34%, seis puntos menos que Mendoza.
Otro triunfo celebrado fue el de Juan Ustarroz, hermano de crianza de Eduardo de Pedro, quien busca retener el municipio de Mercedes. Sacó 20 puntos más que las boletas combinadas de Sergio Massa y Juan Grabois. La Cámpora también impulsa a Leonardo Boto, que con más del 50% de los votos prácticamente garantizó su continuidad en Luján.
En Tres de Febrero se impuso el candidato de JxC y actual intendente, Diego Valenzuela, pero el camporismo se anotó la victoria en la interna de Juan Debandi
Esa serie de triunfos contrastan con los resultados que hasta ahora habían tenido en distritos centrales como Santa Fe, donde su candidato, Marcos Cleri, sacó apenas el 4% de los votos.