Aníbal Fernández, ministro de Seguridad de la Nación, aseguró hoy que tras los hechos de violencia sucedidos el martes en la ciudad de San Salvador de Jujuy por la reforma de la Constitución provincial, ya envió efectivos de la Gendarmería Nacional para “hablar” con los manifestantes que cortan las rutas jujeñas. “Hemos movido gente del destacamento móvil 5 de Gendarmería de Santiago del Estero y está en cada uno de los cortes hablando con la gente. Nuestra responsabilidad es hablar, no reprimir. El gendarme tiene la habilidad de hablar para ayudar a la propia gente”, dijo hoy el funcionario del gobierno de Alberto Fernández en declaraciones radiales.
El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, informo ayer que se había pedido el apoyo de fuerzas federales para contener los disturbios y liberar las rutas tomadas en Jujuy. “Hay una orden de un juez federal para que intervenga. Aníbal Fernández ya tiene una orden para intervenir”, dijo.
Ante la negativa del ministro de Seguridad que le contestó a través de los medios que no intervendría la provincia porque el conflicto es político, Morales advirtió: “Si Aníbal Fernández no actúa rápido lo voy a demandar”.
Fue el juez subrogante de Jujuy, Diego Martín Matteucci, fue quien autorizó, el mismo martes 20, a la Gendarmería nacional y la policía provincial de Jujuy para intervenir en el desalojo de los cortes de las rutas nacionales 9, 34, 52 y 66. La medida había sido solicitada por el fiscal federal subrogante de turno, Carlos Colonnese.
Hoy, Fernández dio a entender que la orden del juez llegó tras varias vueltas burocráticas a sus manos y que se dispuso a acatar el pedido.
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