Algunos, con pocas expectativas, habían llegado para cumplir con un mero trámite partidario. Otros, más entusiastas, se preparaban para hacer explícito su apoyo a la vicepresidenta Cristina Kirchner, en momentos en los que su pelea con el presidente Alberto Fernández por las candidaturas parecía estar llegando al clímax.
Unos y otros tuvieron momentos de relax y hasta de risas abiertas cuando Gildo Insfrán, el “eterno” gobernador de Formosa, se hizo cargo de sus funciones y lideró, en su carácter de presidente, el congreso del PJ nacional en el microestadio de Ferro Carril Oeste, en el barrio de Caballito.
Juntos por el Cambio le arrebata al peronismo una intendencia
Acostumbrado como casi nadie en el estadio al ejercicio solitario del poder –gobierna su provincia desde 1995 y va por un nuevo mandato, a pesar de las quejas judiciales de la oposición–, Insfrán motivó sonrisas al repetir, con tono monocorde, la palabra mágica ante cada punto del temario que debía abordarse.
“Esto se aprueba por u-na-ni-mi-dad”, repitió varias veces el mandatario formoseño, en un “show” de apelación a la unidad partidaria y a la vez un alarde de verticalismo explícito que se extendió por varios minutos.
Más allá de la cuestión formal, a la que el formoseño le dio un toque personal, Insfrán quedó más que bien parado en lo político: fue autorizado, por pedido de los congresales cristinistas y la aprobación tácita del resto, a firmar alianzas entre el peronismo y las demás fuerzas, sean o no integrantes del Frente de Todos.
Desde el peronismo destacaban que el hecho era inusual, dado que, por lo menos en la provincia de Buenos Aires, esa tarea la llevará adelante una mesa de varios dirigentes y no como en este caso, en el que Insfrán podrá “discutir” en la mesa principal las decisiones trascendentes, vinculadas todas al futuro electoral del kirchnerismo.
La carta de la vicepresidenta, que Cristina Kirchner hizo pública cuando el encuentro partidario estaba terminando, tapó algunos datos concluyentes que evidencian la disgregación del partido peronista. A más de un congresal le llamó la atención que la cantidad de congresales fue, finalmente, inferior a 500, muy lejos de los casi 1000 en condiciones de asistir y formar parte de las deliberaciones. Votos más, votos menos, todo fue “unanimidad”, como se encargó de remarcar Insfrán.
El exvocero Biondi renovó su “suerte” en Paraguay
Poco y nada se supo de Juan Pablo Biondi, un incondicional del presidente Alberto Fernández, luego de su desordenada salida de la Secretaría de Comunicación y Prensa, en los últimos meses de 2021.
Dedicado a la consultoría política, y sin hablar demasiado de su traumática salida del poder, el exvocero presidencial buscó una salida laboral por fuera del esquema del oficialismo y comenzó a frecuentar Asunción, en Paraguay, ya en la piel de consultor político.
Puede decirse que tuvo suerte, o que eligió bien: su apuesta fue por Santiago Peña, candidato del exmandatario Horacio Cartes a la presidencia y con quien colaboró durante la reciente campaña, que ganó las recientes elecciones y será presidente del vecino país a partir del 15 de agosto. Cerca del exvocero aseguran que Biondi va a “colaborar desde afuera” con el economista de derecha, y que estará en los próximos días en Buenos Aires, esta vez como “intermediario” entre su exjefe Alberto Fernández y el futuro mandatario paraguayo, en su primer encuentro cara a cara.
La Legislatura, en guardia ante “amigos de lo ajeno”
Los habitués de la Legislatura porteña, en pleno microcentro de la ciudad, se sorprendieron, y mucho, al ver por estos días las nuevas medidas de seguridad implementadas desde la vicepresidencia que encabeza Emmanuel Ferrario (Pro).
Un sistema de huellas dactilares para ingresar en la casa, y celosos empleados verificando que no haya visitas sin permiso se transformaron en el novedoso paisaje en Perú 130, con funcionarios acostumbrados a una laxitud en ingresos y egresos que se frenó luego de algunos episodios casi surrealistas.
Cuentan funcionarios de la casa que las cosas cambiaron desde que los encargados de la seguridad atraparon a un “amigo de lo ajeno” que muy campante intentaba ganar la calle luego de haberse llevado, sin autorización ni permiso alguno, una computadora desde el segundo subsuelo del histórico edificio. “El tipo entró desde la calle, nadie lo paró, y se llevaba una computadora”, comentaron dentro de la Legislatura y en defensa de acciones para “preservar” el patrimonio común.
La pelea entre los Rodríguez Saá entra en fase “artesanal”
Ya falta muy poco para las elecciones del 11 de junio, en las que, tras cuatro décadas, el poder en San Luis podrían cambiar de manos.
El gobernador Alberto Rodríguez Saá intenta que su candidato, el exjuez Jorge “Gato” Fernández, sostenga los votos históricos del PJ, amenazado por el candidato opositor, el exgobernador Claudio Poggi, que espera poder derrotarlo y llegar al poder, esta vez con Juntos por el Cambio como sostén nacional.
Del lado de Poggi, en un segundo plano, aunque muy activo, está Adolfo Rodríguez Saá, el exgobernador, efímero expresidente, senador y hermano del mandatario provincial. Tan fuerte juega el expresidente en aquella inolvidable semana de 2001 que ha iniciado una recorrida diaria por pequeños poblados y ciudades de la provincia, una tarea casi artesanal con la que busca llevar votos para el redil de Poggi.
“Un voto más para nosotros es un voto menos para ellos”, insiste “el Adolfo” en conversaciones con dirigentes peronistas, enojados como él con el mandatario, quien le “alambró” el PJ para que no pudiera intentar el retorno a la gobernación.
El embajador en Honduras, “fan” de Néstor y Cristina
Llegado a la embajada argentina en Tegucigalpa por recomendación inicial de su jefe de La Cámpora, Máximo Kirchner, el embajador en Honduras, Pablo Vilas, no pierde ocasión de demostrar ante sus interlocutores su devoción por el expresidente Néstor Kirchner y la vicepresidenta Cristina Kirchner.
Pruebas contundentes de ese dato son los regalos de cortesía que Vilas suele llevar a sus reuniones con referentes del gobierno de Xiomara Castro, quien también sostiene una larga amistad con la expresidenta desde los tiempos en que su marido, Mel Zelaya, fue desalojado del poder en Honduras.
El lugar de Sergio Massa en el armado electoral de Cristina: un dilema que impacta de lleno en la economía
Hace un mes, Vilas le regaló el libro Néstor, el hombre que lo cambió todo, sobre la vida del expresidente, escrito por Jorge “Topo” Devoto, al secretario de la Presidencia de Honduras, Héctor Zelaya. Y esta semana, en una reunión con la presidenta Castro en la que también participaron directivos de la organización Memoria Abierta, ambos posaron con el libro Objetivo: Cristina. El lawfare contra la democracia en Argentina, una compilación de escritos contra la “persecución judicial y mediática” contra la expresidenta.