El Banco Central (BCRA) logró hoy dejar en pausa la racha vendedora de reservas en la que inéditamente se había sumergido en las últimas seis ruedas, aun en vigencia de un nuevo y más amplio Programa de Estímulo a las Exportaciones (PIE). Captó unos US$2 millones, cifra equivalente a apenas el 0,475% de los US$422,9 millones operados de contado en total en el mercado. O al 1,81% de los US$111,3 millones que los exportadores beneficiados con la chance de vender sus dólares a $300 liquidaron por la “CAM 9″ del MAE.
Se trata de la primera recompra que logra en el mes. De hecho, se desprendió de más de US$470 millones desde el jueves de la semana pasada.
La cifra de hoy no impidió que la entidad cierre la segunda semana con un saldo de intervenciones negativo (algo inédito en tiempos de PIE) al haber cedido otros US$274 millones.
🇦🇷🌱RUEDA DÓLAR AGRO – 5/5/23BCRA compró u$s 111M a $ 300 y vendió u$s 109M en el MULC.Eso da como resultado una COMPRA neta de u$s 2M a $ 4.331,96 por dólar (prorrateando la emisión sobre la compra neta).🚨Acumulados:-Pérdida: $ 138.665M-Emisión: $ 222.285M pic.twitter.com/FthrocfwdT
— Salvador Vitelli (@SalvadorVitell1) May 5, 2023
Tampoco oculta que compró unos US$111M millones a $300 y a la vez vendió unos US$109 millones a mucho menos. Es decir, pagó en promedio la friolera de $4332 por cada dólar reincorporado a las reservas (nuevo récord), según cálculos del economista y especialista en agronegocios Salvador Vitelli, de Romano Group, a la vez que amplió a $138.665 millones la pérdida patrimonial que sufre por comprar caro y hasta muy caro lo que vende entre barato y muy barato, entre otras cosas.
En todo caso, lo destacable es que el primer balance positivo (aunque mínimo) llegó en una jornada en la que los ingresos por el denominado dólar soja (en realidad fueron liquidaciones vinculadas al sorgo, la cebada y hasta el girasol en las últimas dos ruedas) cayeron 18% respecto de la rueda previa. Y en la que a la demanda importadora comercial usual se sumó una factura por US$70 millones para atender pagos por importación de GNL.
En el Banco Central y el Gobierno esperan que la dinámica que observe el mercado en las próximas ruedas sea muy parecida a la observada hoy: con una oferta de divisas algo más sostenida y una demanda algo más acotada. Incluso, se ilusionan con saldos positivos para las intervenciones a medida avance el mes y aparezca las liquidaciones vinculadas con la venta de la demorada y muy magra cosecha de soja.
Empero admiten que para que ello se concrete deberá prolongarse por algunas semanas la relativa estabilidad que mostraron por estos días los dólares libres y mostrar alguna perspectiva de mejora los precios futuros de este grano, que están a la baja por los muy buenos rindes que habría logrado la campaña en Brasil.
Lo mencionado, en medio del cuadro de incertidumbre actual, no se distingue bien si es una previsión o un deseo.
Reservas Netas : – U$S 1553 millones pic.twitter.com/kMrYnwe4QM
— Amilcar Collante (@AmilcarCollante) May 5, 2023
Lo que está muy claro es que la mínima tenencia neta de reservas del BCRA (estaría en torno a los US$200 o US$300 millones) y hasta de reservas brutas o totales (al borde de perforar el piso de US$34.000 millones por primera vez en más de seis años y medio) torna absolutamente necesario que el BCRA, más temprano que tarde, deje de ceder reservas en intervenciones sobre el mercado.
“El Gobierno logró en estos días estabilizar la reciente turbulencia financiera, lo que deja una sensación contradictoria, porque, por un lado, se trató de un leve salto del dólar financiero en términos reales que no llegó a niveles lo suficientemente caros para desalentar la dolarización y alentar las tenencias en pesos. Así continúa un proceso de dolarización, aunque ahora no tiene impacto en las cotizaciones debido a la intervención oficial. El problema reside en que los cartuchos con los que cuenta el gobierno son limitados, y por ende va a necesitar de refuerzos para contener la dolarización en este nivel, ya que la previa electoral”, explicó al respecto en su informe diario la consultora Delphos Investment.
A tono con esta apuesta, lo que se notó es que el BCRA desaceleró el ritmo de devaluación oficial del peso, que había llegado a superar el 8% mensualizado en la semana pasada y cayó al 6,4%, o aún por debajo, en las últimas ruedas.
Por esta razón fue que en la semana que terminó, el tipo de cambio mayorista, que hoy cerró a $226,25 para la venta tras actualizarse otros $0,50 (0,2%), subió $3,57 contra $4,15 de aumento en la semana anterior”, hizo notar el operador Gustavo Quintana, de PR Cambios.