Era sábado por la noche y La Renga daba la bienvenida a su banquete a los 40.000 fanáticos que se acercaron, desde todo el país, a la ciudad entrerriana de Concordia para disfrutar del espectáculo que incluyó una treintena de éxitos. Pero mientras se desarrollaba la fiesta rockera, a cientos de kilómetros de allí, en el barrio porteño de Parque Avellaneda, delincuentes le desvalijaban la casa al bajista de la banda, Gabriel “Tete” Iglesias. Solo en instrumentos musicales se robaron casi $4.000.000 (que son unos US$8000 al blue).
El botín con el que se hicieron los asaltantes incluyó también dos televisores, una consola de sonido, cinco anillos y tres cadenas de oro, un teléfono celular y dinero en efectivo, según pudo saber LA NACION.
Fue la esposa del Tete, Silvina Cendón (que también es música), quien dio a conocer en las redes sociales el triste escenario con el que se encontraron cuando regresaron a su vivienda tras finalizar el multitudinario recital: “El sábado, mientras estábamos en Concordia, entraron a robar a nuestra casa y se llevaron todo. Voy a publicar algunos de todos los instrumentos que se llevaron. Si los ven publicados en algún lugar contáctense conmigo o con alguien de mi familia, gracias”.
Los ladrones se llevaron dos bajos: un Yamaha Bb200 que nuevo está valuado en cerca de $500.000 y un Gibson Sg que usado puede costar $1.500.000. También se hicieron de un piano Yamaha p-105 (con uso se comercializa a $515.000) y una Guitarra Eléctrica EpiPhone Flying que puede costar unos $500.000.
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El músico también sufrió el robo de varios platillos de una batería y un redoblante Solidrums- que tal vez podrían pertenecer a su hermano Jorge “el tanque”, que es quien toca ese instrumento en La Renga -, una pérdida económica que ronda $1.000.000. Un equipo de bajo Peavey ($200.000) y una caja potenciada Behringer ($300.000) también “desaparecieron” de la casa de Iglesias.
Efectivos de la Comisaría Vecinal 9 C de la Policía de la Ciudad se acercaron anteayer por la tarde a la casa ubicada el barrio de Parque Avellaneda luego de ser noticiados del robo a la vivienda. Todas las habitaciones estaban revueltas cuando la familia regresó de Concordia.
De acuerdo a la investigación, en el inmueble no se observaron violentadas las puertas ni ventanas. Ahora, interviene en el caso, denuncia mediante, la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N.º 29, a cargo del doctor Brunet y ante la Secretaría Única de la doctora Caffarelli.
