La perspectiva para el sector logístico de cara al 2024 dependerá, en mayor medida, del resultado de las elecciones de octubre próximo. Con esta premisa Daniel Artana, economista jefe de FIEL, puso sobre la mesa la situación vigente en materia económica y financiera de la Argentina, en el encuentro organizado por la entidad llamado “Proyecciones económicas para operaciones logísticas 2023-2024″.
Según el especialista, la Argentina camina hacia una nueva devaluación y hacia una consolidación fiscal y esto va a requerir ajustes de precios relativos, con lo cual la inflación del primer semestre del año que viene será muy alta, pero “estos son los requerimientos para llegar a poder tener algún grado de estabilización. Recién cuando se definan las próximas elecciones contaremos con un panorama más preciso, con más elementos sobre el futuro de la economía”, aseguró Artana.
Por su parte, Jorge Jares, director de Diagnóstico y Coaching Logístico (DyC), dijo que, según datos del Indec, se espera un flujo de exportaciones de 116 millones de toneladas para el 2024, contra los 98 millones de 2023, “esto tiene una dinámica creciente significativa para el próximo año”, aseveró el especialista.
Según Artana, la economía ya transitaba un receso moderado en el sector industrial y construcción por la sequía del 2022, pero, el financiamiento y las reservas del Banco Central “permitieron sostener la actividad económica un poco mejor”. También hizo referencia a que la aceleración de la inflación después de la devaluación fiscal post PASO, con un traslado a precios, “es negativa para el consumo de los próximos meses”. Agregó que debería haber una recesión más profunda por la caída de la actividad, entre el 2,5 y el 3%.
Sobre el FMI, Artana dijo que el gobierno se comprometió nuevamente con el fondo monetario a nuevas metas fiscales, monetarias y de reserva. En este sentido expresó : “yo creo que no va a cumplir ninguna de las tres; el fondo monetario decidió desembolsar para que el gobierno no entre en default con el organismo”, destacó el economista.
La revisión de noviembre que, seguramente será con el equipo económico que se designe para la nueva presidencia del 10 de diciembre, observará que “los déficits fiscales son más altos en el segundo semestre que en el primero”, explicó Artana. Por este motivo “se requiere una baja de gastos significativa”, dijo. Según el especialista, el nivel de emisión es enorme y la generación de exceso de pesos termina presionando sobre los niveles de inflación.
Los últimos datos de FIEL del mes de julio sugieren una tendencia declinante en la industria, agravada por la sequía y la escasa disponibilidad de divisas que tiene el gobierno y que provoca un impacto negativo en el nivel de actividad de las importaciones.” Esto ocurrió porque “el gobierno autoriza importaciones que después no deja pagar o posterga el pago, y por lo tanto, se ha ido acumulando una deuda no deseada de las empresas con sus proveedores y sus casas matrices de alrededor de US$15.000 millones”, explicó Artana. Todo este escenario hizo “que las empresas tengan dificultades para pagar lo que el gobierno les hizo pedalear desde hace 6 meses”. Y continuó, “este panorama hace que las empresas tengan que sacrificar actividad para no seguir endeudándose”, destacó Artana.
Sobre los índices inflacionarios, el economista dijo que “el efecto de la devaluación es mínimo y de hecho, con la inflación que se va a dar en agosto, septiembre y octubre, el efecto del 21% se licúa por completo”. La inflación de la tercera semana de agosto “nos dio 6% en la semana, es un registro altísimo,. Esto sugiere que la inflación va a estar entre 12 y 13% en agosto y en septiembre también la inflación va a ser de dos dígitos, entre 12 y 14%”, indicó.
Flujos Logísticos
A su turno Jorge Jares, dijo que “los flujos logísticos tienen su propia inercia”. Con respecto a las toneladas transportadas, “el sector agropecuario participa con el 44% y la industria con un 19%”, aseguró Jares. “Este año es uno de los más desastrosos en el transporte de larga distancia por la sequía. Solamente en la zona de los puertos de Gran Rosario y algunos otros se perdieron medio millón de viajes”, indicó el especialista.
IA y Big Data
También la tecnología tuvo su lugar en el marco del evento de FIEL. Sebastián Yañez, director de TI -ID Logistics, se refirió a la Inteligencia Artificial – IA- como la combinación de algoritmos cuyo propósito es la creación de máquinas que imitan la inteligencia humana. Según Yañez, “no existe una única herramienta de inteligencia artificial”. Esta tecnología bastante disruptiva está teniendo impacto directo en los negocios, en el mercado, en las industrias, en la vida cotidiana, “creo que si las empresas no empiezan a aplicar fuertemente el concepto de IA para mejorar procesos económicos o de resultados se les va a complicar en el futuro poder tomar decisiones”, aseveró .
El titular de ID Logistics afirmó que “alimentamos con todos los sensores que hoy por hoy podemos poner en una empresa en el sector logístico. Tenemos GPS, balanzas, sensor de temperatura, sensor de presión de neumáticos. Toda esa información la tenemos que guardar y almacenar por un tiempo y podemos entrenar al algoritmo para procesar esa información para un aprovecharla en algún proceso, por ejemplo de costos”, detalló
Por su parte, Sebastián Galanzino, Presidente RDS Sistemas S.A., destacó que “la IA es un concepto que debemos utilizar, especialmente en logística. Desde el momento en que una máquina puede interactuar de una manera casi humana, hace que todos tratemos de interactuar con estas tecnologías”, aseveró. La IA “existe desde hace tiempo. Muchas empresas de logística ya la usan, pero hay varios modelos. La IA puede predecir datos con algoritmos basados en la conducta del hombre, pero hay que tener cuidado porque se abre un panorama nuevo que hay que evaluar”, explicó.
Según Galanzino, cuanto más información se tenga, más provechoso va a ser el resultado, “porque los algoritmos que se generan se van reentrenando y brindan una soluciones nuevas”.
Ahorro y productividad
La información sirve como una herramienta valiosa para generar ahorro y aumentar la productividad, según los especialistas.
Por ejemplo, Sebastian Yañez, aseguró que “en nuestra empresa comenzamos hace un par de años con un proyecto sobre el tiempo muerto de los pickers”. Sobre la aplicación, el especialista señaló: “aplicamos toda la información linkeada con la información de todo el sistema de control de datos e ingresos, y ahí el sistema empezó a generar un algoritmo sobre patrones de tiempo y de productividad”, expresó. “Esto nos brindó opciones de correcciones de horarios de la gente, cambios turnos…Estos patrones te ayudan a tomar decisiones que, en definitiva, generan ahorro directa o indirectamente”, manifestó Yañez.