El expresidente Mauricio Macri arremetió contra el Gobierno por el aumento de los aranceles de importación de notebooks, que fue oficializado el pasado 14 de marzo a través del Boletín Oficial. El impuesto, que era del cero porciento en 2017, subió a 16, y este incremento es parte de un idea y vuelta que arrancó hace diez años.
Por medio de un posteo en Facebook, Macri criticó en duros términos al oficialismo, al que calificó de ser “caótico y decadente”, y se refirió a esta última decisión como “terrible” ya que “en sólo unos días ya aumentó los precios (en algunos casos, hasta 80%) para millones de argentinos que las necesitan para estudiar o trabajar”. “En el mundo de hoy, tan rápido e interconectado, no hay nada más importante que tener una buena computadora, pero este Gobierno, como muchas otras veces, eligió beneficiar a unas pocas empresas amigas y perjudicar a los argentinos”, remarcó.
A pesar del enojo, el líder de Juntos por el Cambio anticipó que “será una medida de patas cortas”. “El próximo gobierno la eliminará en sus primeros días de gestión. Todos entendemos que millones de estudiantes, comerciantes, profesionales y científicos son más importantes que un puñado de empresas que no quieren competir. Sin estos aranceles y también sin licencias no automáticas de importación (que también hay que quitar), los precios de las computadoras volverán a bajar”, aventuró.
Y volvió una vez más sobre lo hecho durante su segundo año en el Ejecutivo: “Ya pasó en 2017. Quitamos el impuesto extra para importar notebooks y accesorios. En pocas semanas los precios bajaron más de un 35%. Tuvimos un boom de ventas como no se veía hacía tiempo”. “Eso es lo que hay que volver a hacer”, insistió.
Para Macri, la resolución es justificada desde el oficialismo “con la cantinela de la industria nacional y los puestos de trabajo, un viejo recurso para favorecer a amigos”. “Lo cierto es que las empresas que fabrican notebooks en la Argentina agregan poco valor y emplean a sólo 3.000 personas. Los servicios informáticos, en cambio, que explotarían si bajamos los impuestos y quitamos las licencias, emplean a más de 120.000 personas”, desmintió a continuación.
“De este gobierno caótico y decadente ya no se puede esperar nada, pero su capacidad de daño sigue vigente. Nos esperan semanas y meses difíciles, para los argentinos en general pero también para los dirigentes de Juntos por el Cambio, que deberemos estar unidos y con la mente fría, haciendo la lista de cosas a arreglar, si ganamos, a partir de diciembre. Bajar el precio de los computadoras debería estar ahí arriba entre las primeras”, concluyó.
Según se desprende del decreto 136/2023, publicado en el Boletín Oficial, la actual decisión se encuentra justificada en “que por su impacto económico y social, el desarrollo y promoción de una industria nacional productora de equipamientos informáticos portátiles resulta una prioridad en las políticas desarrolladas por el Gobierno Nacional, puesto que el crecimiento de la industria en cuestión, además de generar un impacto positivo en el empleo especializado con alto valor agregado, reduce la dependencia externa sobre equipos de alta sensibilidad y de uso intensivo para todo el entramado productivo y de la sociedad en general, reduciendo la brecha tecnológica”.
Además, se señala allí que “el aumento de los niveles de producción de tales equipos redundará en un aumento de la oferta disponible de los mismos en el mercado interno a precios más competitivos y accesibles, permitiendo subir los niveles de las exportaciones de los bienes fabricados localmente, de alto valor agregado”.
Fuente: La Nación. Ver nota completa.