La diputada y exgobernadora bonaerense María Eugenia Vidal siguió los pasos del expresidente Mauricio Macri y anunció esta noche que no competirá como precandidata a presidenta de Pro en las primarias de Juntos por el Cambio. Con esta decisión, la oferta electoral del partido para las próximas elecciones se reducirá a solo dos postulantes: el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y a la exjefa de Pro Patricia Bullrich.
“‘No se peleen, ´´Estén unidos, me dijeron en cada recorrida. Por eso, porque los escuché y porque los entiendo, decidí que esta vez no voy a ser candidata a Presidenta de la Nación, fue la frase con la que se bajó en una publicación en Twitter. Nada dijo sobre una eventual candidatura como jefa de Gobierno porteña.
En su mensaje, la exgobernadora bonaerense sostuvo: “Ésta, como cada decisión de mi carrera política fue tomada en la calle, no detrás de un escritorio. Decidí escuchando a los que quieren educarse para progresar, a los que eligen libertad y no sometimiento, a los que trabajan y a los que dan trabajo. Decidí recorriendo y planificando el futuro que quiero para mi país”.
Hace un año y medio que recorro el país y, si bien estoy orgullosa del potencial que tiene nuestra Argentina y del empuje de su gente, no puedo ignorar la angustia, el miedo y la tristeza que me transmiten en cada provincia. Paraliza la inflación, asusta la inseguridad, aturden… pic.twitter.com/MDNSwl8A18
— María Eugenia Vidal (@mariuvidal) May 4, 2023
Al declinar su candidatura presidencial, quedan seis aspirantes de Juntos por el Cambio a competir en las primarias de agosto próximo. Además de Bullrich y Rodríguez Larreta, de Pro, permanecen en carrera el gobernador de Jujuy Gerardo Morales y el diputado Facundo Manes, de Unión Cívica Radical; Elisa Carrió, por la Coalición Cívica, y Miguel Ángel Pichetto, por el Encuentro Republicano Federal.
La alternativa porteña
La decisión de la exgobernadora bonaerense de bajarse de la contienda electoral tomó forma el fin de semana pasado, cuando se reunió a solas con el expresidente Macri en su quinta Los Abrojos. Allí Vidal le habría anticipado al expresidente su decisión. En la reunión analizaron la alternativa de que la actual diputada compitiese como candidata a jefa de gobierno porteño en una suerte de “prenda de unidad” de Pro para evitar que el radicalismo le arrebate al macrismo su bastión.
Sin embargo, esta posibilidad comenzó a desdibujarse en los últimos días. Antes de viajar a los Estados Unidos Macri envió señales claras en favor de la candidatura de su primo Jorge Macri; en la misma sintonía se muestra Bullrich, otro de los pilares de la postulación del actual ministro de gobierno porteño e intendente de Vicente López en uso de licencia.
También Rodríguez Larreta sugirió que Vidal no sería de la partida para competir por su sucesión. Pocas horas antes de que la exgobernadora anunciara que no competiría en estas elecciones, el jefe de gobierno porteño insistió de que Pro solo tiene dos candidatos en la ciudad de Buenos Aires.
En rigor, Rodríguez Larreta promueve, bajo cuerda, a su ministro de Salud Fernán Quirós; de hecho, designó a un hombre de su máxima confianza, el diputado Álvaro González, como su jefe de campaña y encargado de hacer crecer a Quirós en las encuestas. La candidatura del ministro cuenta, también, con el apoyo de la Coalición Cívica.
Paulatinamente, la grilla porteña se va despejando. El martes pasado la ministra de Educación Soledad Acuña anticipó que no competiría por la sucesión de Larreta, por lo que la oferta de Pro para las primarias de agosto quedará limitada a Jorge Macri y Quirós. Sus rivales de Juntos por el Cambio serán Martín Lousteau, por la UCR; Graciela Ocaña, por Confianza Pública y Ricardo López Murphy por Republicanos Unidos.
