En el marco del séptimo capítulo de Sustentabilidad, organizado por LA NACION, Gabriel Berger, profesor de la Escuela de Negocios y Director del Centro de Innovación Social de UdeSA, expuso los aspectos más importantes para tener en cuenta al pensar en el futuro de la sustentabilidad en el ámbito privado. “Estamos viviendo una evolución en el campo de la sustentabilidad empresarial que lleva más de 50 años. Los nuevos cambios y tendencias amplían la agenda y el alcance de la sustentabilidad empresarial”, explicó el experto.
Berger señaló cinco temas clave para comprender hacia dónde se dirige la sustentabilidad: la economía circular, las energías renovables, la responsabilidad social corporativa, la transparencia y divulgación de información, y la innovación y tecnología sostenible. “Aquellas empresas que no tengan en cuenta estas tendencias perderán de vista este cambio significativo que implica posicionarse en el mercado poniendo en el centro la sostenibilidad”, amplió.
Para entender la agenda de la sustentabilidad empresarial es necesario “adoptar un enfoque más estratégico, transformador, colaborativo, disruptivo y resiliente” y también tener en cuenta cinco aspectos: cómo se integra en la agenda corporativa, comprender cómo se incorpora durante todo el ciclo de vida de la empresa, trabajar en alianzas estratégicas, pensar en tecnologías disruptivas y enfocarse en la resiliencia.
Según el estudio global de Edelman Trust Barometer, hubo un colapso en el optimismo económico en los últimos años. “De 2019 a 2023 hubo una caída de tres puntos en esta variable, es decir, las personas son más pesimistas con respecto al futuro”, explicó. También ha crecido enormemente la ansiedad existencial en torno a factores económicos y sociales en general.
“La pérdida de trabajo, la inflación, el cambio climático, la amenaza de una catástrofe nuclear, la reducción en la disponibilidad de alimentos y la disminución en la disponibilidad de energía se convierten en temas de ansiedad en todo el planeta”, describió.
Esta crisis de confianza es clave para comprender las demandas al comportamiento empresarial. Según el estudio anterior, desde 2019, las empresas son reconocidas como el tipo de organización más confiable. Mientras que en esos 27 países el 62% confía en las empresas, en la Argentina solo el 52% lo hace.
“La población espera que las empresas se comprometan, actúen y que quienes las lideran asuman el compromiso en estos temas”, estableció el especialista. Además, Naciones Unidas alerta que nos acercamos a una catástrofe climática y que en este tema “existe una brecha en la acción”, ya que los planes de las empresas avanzan lentamente y la transformación que se requiere también lo hace.
Berger se refirió a las tendencias en este ámbito. “Las empresas están comprendiendo que esto es fundamental para crear valor”, indicó. Además, el reconocimiento de la agenda de la sustentabilidad es crucial para la competitividad corporativa. “Ninguna empresa es competitiva si no coloca en un lugar central cómo aborda los desafíos de la sustentabilidad”, destacó.
También existe una creciente atención a la estrategia de generación de valor social y ambiental como fuente de oportunidades de negocios. “No se trata solo de cómo gestionamos la empresa, sino de cómo puede ser una fuente para hacer mejores negocios que contribuyan a los desafíos planteados por el planeta”.
Las empresas están compitiendo por liderar la incorporación e integración de la agenda de sustentabilidad empresarial. “Debemos reconocer que el camino no es claro, las empresas están aprendiendo a adaptarse a los desafíos post pandemia”, dijo. Y enumeró: la dificultad que existe en las economías avanzadas para que las personas quieran volver a trabajar de manera presencial, los desafíos del cambio climático y cómo reconstruir el contrato de las empresas con la sociedad a través de nuevos paradigmas empresariales.
Cómo entender la sustentabilidad
Jacqueline Pels, directora del Espacio Negocios Inclusivos (ENI Di Tella) y referente en sustentabilidad, sugiere que a este término hay que contemplarlo desde distintas aristas. Entre ellas, menciona la social, la ambiental y la ecológica. Aunque cuestiona que la primera noción es muchas veces relegada, “Hoy, los programas de sustentabilidad de las empresas, abordan importantes temas como la reducción de la huella de carbono o el desarrollo de una economía circular, sin embargo, no tienen en su agenda temas tales como la fecundidad, la longevidad y la tecnología”, destacó a través de un video que fue transmitido durante el evento.
Y su argumento gira en torno a que, a nivel mundial, la tasa media de fecundidad se redujo a la mitad en las últimas dos décadas donde se pasó de un promedio de cinco a 2,5 hijos. En paralelo, aumentó la expectativa de vida y la población longeva se potenció en relación a los jóvenes. Frente a este contexto, la especialista se cuestionó que, si esta situación no se revierte, en el futuro habrá menos personas laboralmente activas para sostener la economía mundial. Por lo tanto, explicó que la sustentabilidad también podría definirse desde una mirada demográfica, precisamente como el bienestar de las generaciones futuras.
En este camino, Pels mencionó a la tecnología como otro eje que hay que tener en cuenta cuando se habla de sostenibilidad. Al respecto, precisó que, si bien está asociada a fomentar el empleo, en algunos casos generan altas emisiones de huellas de carbono. “Se estima que la minería de criptomonedas genera alrededor de 297 teravatios por hora y alrededor de 130 millones de toneladas métricas de emisiones de carbono. Por otro lado, las economías también forman parte de los desafíos de la sustentabilidad porque operar en este mercado genera grandes costos para los trabajadores”, comentó la experta. El último eje que sumó fue el de la incertidumbre y volatilidad en el que se sumerge el mundo moderno regido por guerras y crisis de todo tipo.
