Más de 150 productores y criadores de Hereford de la Argentina, Uruguay y Chile recorrieron la Patagonia para conocer las características de los ejemplares y los distintos tipos de manejo de los rodeos en cabañas de la región, teniendo en cuenta las condiciones geográficas, climáticas y la gran extensión de los campos. Fue en el marco de la Gran Gira Ganadera Patagonia Sur, organizada por la Asociación Argentina Criadores de Hereford (AACH)..
“Durante la gira se generó un espacio de intercambio de opiniones que fue muy enriquecedor para los productores de Hereford participantes, que provenían desde diferentes regiones de la Argentina y del extranjero. La diferencia de los climas y los sistemas productivos y la excelencia de la calidad y la genética de la hacienda recorrida fue uno de los principales temas de intercambio”, explicaron desde la entidad.
Según se informó, la visita comenzó en cabañas de la localidad de Sarmiento. Durante cuatro días se recorrieron cabañas de las localidades de Gobernador Costa y Esquel, en Chubut. “Se visitaron las cabañas Media Luna, Santa Elena, Don Riquín, Don Manuel, San Marón, Laguna del Toro, El Chalet y Río Frío”, afirmaron.
Los organizadores dieron detalles de los sistemas productivos que se presentaron. “En términos generales se observó un manejo muy minucioso del rodeo, tanto en el sistema de cría como en la recría, engorde y preparación de los reproductores. Una vez más, Hereford mostró sus destacadas aptitudes de adaptabilidad y fertilidad, entre otras características de la raza”, comentaron desde la AACH.
Explicaron que, debido a la “rigurosidad climática, y en ocasiones las bajas precipitaciones”, durante las diferentes etapas del año los planteos productivos deben ser muy ajustados con el uso de las reservas corporales de los vientres. “En ciertas zonas contar con pastos de muy buena calidad, como los que se encuentran en los mallines, puede ser una gran ventaja y en ciertas ocasiones pensar en la posibilidad de la suplementación con forraje reservado o henificado, ya que en los momentos más fríos del año hay una importante escases de pasto”, indicaron.
Por otro lado, en la AACH señalaron que lo que “llama la atención” a muchos productores de otras regiones es que, a pesar del clima hostil, la presión de selección sobre fertilidad en el rodeo “es muy alta”.
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“En las cabañas y campos recorridos siempre se hizo hincapié en la aptitud materna, en la fertilidad de los vientres exigiendo un ternero por vaca por año, apuntando a servicios de entore cortos con una concentración importante de partos en el primer mes de nacimientos, eliminando del rodeo a las vacas que no presentan terneros al destete”, expresaron.
Según detallaron, los cabañeros y productores de Hereford hicieron hincapié en el trabajo que realizan en tener “buenos pesos al destete y una excelente precocidad sexual tanto en machos como en hembras”. También remarcaron la importancia de utilizar los pastizales nativos como alimentación de menor costo para así obtener la mayor rentabilidad ante la dificultad de contar con suplementos por las distancias a las plantas productoras.
Precisaron que en el recorrido de los establecimientos se pudo observar la similitud en el trabajo sobre líneas pastoriles, trabajando mucho en la rusticidad y adaptabilidad al medio.
“En términos generales, los índices de preñez son superiores al 90%. Los terneros suelen destetarse pesados, las hembras entre 200 y 220 kilos y los machos, entre 220 y 240 kilos. Su recría suele ser a campo y solo en situaciones puntuales recurren a la suplementación. En caso de los toritos a venta, antes de la llegada de los remates suelen tener esa preparación previa ya que el resto de su crianza suele ser a campo”, informaron.
Además de las jornadas a campo, se realizaron charlas de capacitación sobre la utilización de DEPs (Diferencias Esperadas de progenie), a cargo de Patricio Spiazzi, director de la asociación, y el Departamento de Mejoramiento, con María Calafé, genetista de la organización. También con Alejandro Costa, expresidente de la Asociación Uruguaya de Hereford.
“Con gran participación e interés del público, se hizo foco en la utilización de esta herramienta como un complemento necesario a la selección por fenotipo, para trabajar en diferentes características productivas. La utilización de estos datos objetivos ayuda enormemente a acelerar la mejora genética de los rodeos y evitar que se utilicen animales con valores en características desfavorables”, concluyeron.