A contramano de los números que informa el Indec, la inflación está muy lejos de ser un problema preocupante para la mayoría de los países sudamericanos. Con la excepción de Venezuela y la Argentina (hoy se confirmó un 7,8% en mayo y de 114,2% en doce meses), en el resto de la región el impacto de la guerra en el precio de los alimentos o la discusión acerca de cómo afecta la emisión en la cotización de las monedas locales son temas superados y que no despiertan ningún tipo de polémica.
El panorama es tan diferente al que se vive en el mercado argentino que en mayo todos los países vecinos -excepto Venezuela- informaron que la inflación del mes comenzó con un 0 adelante, dejando atrás los peores pronósticos que alertaban sobre una peligrosa aceleración del costo de vida.
Chile es uno de los que muestra una desaceleración más marcada de los aumentos de precios. Esta semana, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) reportó para mayo un alza del 0,1% en mayo, acumulando un aumento de 2,3% en lo que va del año y un alza de 8,7% en doce meses. El dato sorprendió a los analistas, que esperan una suba entre 0,3% y 0,4% para el quinto mes del año. Mayo además es el segundo mes consecutivo con un incremento menor a 1%, con una inflación anual que se mantiene en un dígito, ya que el mes pasado alcanzó 9,9% y este mes bajó a 8,7%.
Ecuador es otro de los miembros del club del “0 y pico”. En mayo, la inflación en el país que tiene su economía dolarizada alcanzó el 0,09% y de esta manera acumuló en los últimos 12 meses una suba del 1,97%, lo que implica que por primera vez en casi tres años el dato anualizado se ubicó por debajo del 2%.
Ejemplo guaraní
En materia de inflación, Paraguay continúa siendo una de las economías de la región con mejores resultados. El Banco Central de ese país informó hace unos días que el costo de vida en mayo se mantuvo sin cambios y así acumuló en los primeros cinco meses del año un incremento del 2,5%. El informe oficial precisó que los aumentos en algunos alimentos fueron compensados por las bajas en los combustibles y los productos de ganadería.
El boom de turistas de Montevideo y otras ciudades orientales que cruzan a hacer compras a la Argentina es una muestra del buen momento que atraviesa la economía uruguaya. En mayo, la inflación en el país alcanzó apenas al 0,01% y en el acumulado interanual se ubicó en 7,1%, lo que da cuenta de un cambio en la tendencia, después de rozar los dos dígitos en septiembre de 2022.
La lista de países con inflación que empieza con 0 en mayo también incluye a Brasil. Según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), el mes pasado el aumento de los precios en el socio mayor del Mercosur se ubicó en 0,38%, lo que implica una desaceleración frente al 0,61% de abril. Así, Brasil acumuló una inflación de 2,95% en los primeros cinco meses de 2023 y del 3,94 % interanual.
La historia se repite con Colombia, Perú y Bolivia. Colombia es uno de los países en los que la inflación se había disparado en 2022 y, si bien hoy continúa en los dos dígitos anuales, en los últimos meses empezó a mostrar señales de desaceleración, con una suba de 0,78% en abril y de 0,43% en mayo.
El panorama es parecido en Perú, que el mes pasado tuvo una inflación del 0,31%, aunque el acumulado interanual continúa relativamente alto (7,99%).
Por su parte, Bolivia cerró mayo con una leve aceleración de los precios, aunque los números serían el sueño de cualquier ministro de Economía argentino. En el último mes, el costo de vida registró un alza del 0,57% (frente al 0,18% de abril) y en el acumulado de los últimos 12 meses la suba se ubicó en 2,9%.
La otra cara
En los últimos años, el gran consuelo para la Argentina fue que Venezuela estaba peor en materia de inflación. Sin embargo, el panorama también empezó a cambiar. Por segundo mes consecutivo, en mayo, la Argentina mostró un salto en los precios superior al que se registró en la tierra gobernada por Nicolás Maduro.
A fines de la semana pasada, el Observatorio Venezolano de Finanzas -una entidad independiente que viene monitoreando los precios de una manera mucho más confiable que el Banco Central de Venezuela– informó que la inflación de mayo había alcanzado al 7,6%, lo que implicaba una suba de cinco puntos frente a abril, pero que todavía se ubica por debajo de los niveles argentinos.