Luego de rechazar, por electoralistas, las medidas que anunció el Ministerio de Economía para paliar los efectos de la última devaluación, Juntos por el Cambio le hará otro desaire al ministro y candidato oficialista Sergio Massa. Esta tarde, en la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, rechazará el proyecto de blanqueo de capitales que, por pedido de Massa, el oficialismo pretende apurar antes de las elecciones.
Así lo resolvieron ayer los miembros opositores de la Comisión de Presupuesto y la cúpula del interbloque. No solo están en desacuerdo con varios puntos del proyecto; desconfían, además, del ministro Massa y no quieren concederle una herramienta tan gravitante un blanqueo de capitales cuando faltan solo dos meses para las elecciones generales. El oficialismo, no obstante, avanzará en su decisión de despachar hoy mismo el dictamen.
“Este proyecto entra en un momento de crisis, en el final de un gobierno, sin un marco de reforma tributaria. Es un ejemplo más de la política del parche, siguen buscando soluciones de corto plazo que patean el problema para adelante”, anticipó la diputada Germana Figueroa Casas (Pro), la voz cantante de Juntos por el Cambio en este tema.
El radical Martín Tetaz coincidió. “No estamos de acuerdo con que se le dé un beneficio al que no cumple y otra vez se castigue al que cumple”, enfatizó el diputado de Evolución Radical.
Figueroa Casas agregó: “En la letra chica del proyecto queda claro que se beneficia exclusivamente a los que están fuera de la ley y no a los que cumplen. No se contemplan beneficios para los contribuyentes que están al día y tampoco se acompaña con una moratoria a aquellos que venían cumpliendo y quizás hoy enfrentan problemas económicos y necesitan reestructurar sus deudas. Es una ley injusta que refuerza la cultura de la evasión”.
El proyecto propone un blanqueo voluntario de capitales para bienes situados en el país o en el exterior durante un período de 360 días corridos desde la entrada en vigencia de la ley. Los bienes comprendidos serán la tenencia de moneda nacional y extranjera, activos financieros, bienes inmuebles, bienes muebles y créditos, y podrán acogerse tanto personas físicas como jurídicas.
Según la iniciativa, quienes blanqueen sus tenencias pagarán un impuesto que va del 5% al 20% del total declarado, según la celeridad con la que se haga la declaración. Asimismo, contempla una alícuota diferencial (más alta) para los bienes situados en el exterior. Asimismo, se crea un “Régimen simplificado de declaración” con una alícuota especial del 1,5%, aplicable a personas humanas que exterioricen tenencia de moneda nacional y/o extranjera y el monto no supere el 35% de los ingresos anuales promedio de los últimos tres períodos fiscales y con un tope de hasta US$50.000.
Quien exaltó la necesidad de apurar la aprobación de este nuevo blanqueo en el Congreso fue Guillermo Michel, jefe de la Aduana y mano derecha de Massa. Ante los legisladores, Michel remarcó la semana pasada que está en vigencia el acuerdo de intercambio de información fiscal con los Estados Unidos, el cual permitiría ampliar la base imponible para bienes personales y ganancias en unos 90.000 millones de dólares.
“Seria importante contar con esta herramienta para contribuir con un sistema tributario más equitativo donde contribuyan más lo que más tienen”, aseveró Michel.