La escasez de lluvias dejó a su paso extensas áreas de tierra resquebrajada en las lagunas, ríos y arroyos de la provincia de Buenos Aires. Este impactante fenómeno visual despertó un gran interés tanto entre los visitantes como los habitantes locales, quienes acuden a contemplar de cerca los efectos visuales de la sequía en el paisaje.
En este contexto, durante este fin de semana, un grupo de parapentistas capturó imágenes desoladoras que muestran los efectos devastadores de la falta de precipitaciones en una de las lagunas más emblemáticas de la llanura pampeana: la laguna de Bragado.
En diálogo con LA NACION, Franco Malfatto, uno de los integrantes del grupo, explicó que más del 50% de este extenso cuerpo de agua, que se extiende sobre una superficie de 350 hectáreas, se encuentra completamente seco, mientras que la otra mitad apenas cuenta con 20 a 30 centímetros de profundidad, en contraste con los habituales dos metros.
El joven contó que con un grupo de amigos todos los fines de semana hacen parapente; salen de una pista de aviones de un familiar que está por la zona. Sin embargo, el sábado pasado se les ocurrió hacer algo diferente, aprovechar la laguna que estaba seca y despegar desde allí.
La laguna se encuentra a 2 kilómetros de Bragado, en donde él trabaja como comerciante, y a 200 kilómetros de la Capital Federal. Es parte del Parque General San Martín.
Lograron hacer una “máquina” de producir carne en un campo muy difícil
“Cuando salimos a volar alrededor de la ciudad solemos sobrevolar la laguna porque en caso de emergencia se puede aterrizar en cualquier lugar, pero esta vez quisimos aprovechar que estaba seca y salir directamente desde ahí. Mientras tomabamos mate buscamos una zona en donde no había barrio, preparamos los equipos y despegamos”, relata.
“Es impactante ver cómo toda la fauna desapareció”, se lamentó Malfatto. En ese sentido, recordó que antes, cuando sobrevolaban sobre la superficie de agua, solían observar a turistas acampando, pescando y realizando diversas actividades. Incluso se llevaban a cabo torneos de pesca. Sin embargo, asegura que ahora todo eso está completamente “parado”.
“Desde hace cuatro meses que más de la mitad de la laguna está seca. Se recuperó un poco después de la última lluvia, pero luego volvió a secarse”, señaló.
Esta situación se repitió en otras regiones. Hace unos meses, LA NACION contó la experiencia de Bike Team Rojas, un grupo de ciclismo que aprovechaba que el lecho del río Rojas, en el norte de la provincia de Buenos Aires, estaba seco para practicar mountain bike. Este medio también informó sobre la historia de una mujer que, mientras caminaba por la laguna de Chascomús, quedó atrapada en el barro y debió ser rescatada por personal de Defensa Civil de esa localidad.