BARILOCHE.– El diputado liberal Javier Milei llegó anoche pasadas las 22 al hotel Llao Llao para participar por segundo año consecutivo del exclusivo foro que se hace aquí. Acompañado por su hermana y asesora política, Karina, el precandidato de la Libertad Avanza se encerró directamente en su habitación del hotel y cenó solo con ella, como publicó él mismo en Twitter, para desmentir que habría un cruce con la referente del Pro, Patricia Bullrich.
Durante la noche, comenzó a pensar la exposición que haría este mediodía a los empresarios y se decidió por explicar su principal apuesta si es presidente de la Argentina: el proceso de dolarización.
Durante la mañana, decidió volcar esas ideas al papel en una serie de apuntes que tomó. “Hay temas de la dolarización que noto que no lo tienen claro ni los economistas”, dice el diputado nacional. “Y por ende todo el debate es inválido. El problema es que la gente y los economistas no entienden la naturaleza de la demanda de dinero. Y ahí está toda la ensalada. Es más, la formulación de los libros está mal, en el equilibrio general, no se pone al ingreso como argumento y la tasa de interés tampoco, porque surge del precio relativo de los bienes presentes con respecto a los futuros”, dice el exprofesor de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
El diputado liberal insiste en que es posible aplicar una dolarización, pese a que en la economía sobran los pesos y faltan dólares. Esta medida, junto con la de cerrar el Banco Central (BCRA), son las dos decisiones que más generan incertidumbre en el empresariado y los inversores.
“Hay gente que sí va a estar asustada. La casta está asustada ahora. La casta son los políticos ladrones, los sindicalistas chorros, los empresarios prebendarios y los periodistas que viven de la pauta y de los sobres. Y hay varios malos acá. No creamos que son todos ángeles”, dijo Milei.
“Si yo le digo a un empresario prebendario que va a tener que competir con el mundo, después de que reforme el Estado, el mercado laboral y que seamos competitivos en términos de presión fiscal, al tipo que tiene la vaca atada no le va a gustar. Con lo cual es obvio que hay gente que en la construcción de este sistema fascista empobrecedor que tenemos que gana plata y que, si le tocan los intereses, se va a enojar, obvio. Pero la pregunta es ¿qué hacemos? ¿Nos bancamos la extorsión de los que están hundiendo el país? O vamos y los enfrentamos. Yo estoy dispuesto a enfrentarlos a toda la casta, porque también creo que la gran mayoría de los argentinos son argentinos de bien”, agregó el diputado en una conferencia de prensa antes de hablar con el empresariado.
En el salón principal del Llao Llao, donde se sirven los desayunos, el círculo rojo esperaba al precandidato liberal para almorzar. Entre los presentes estaban Eduardo Elsztain (Grupo IRSA), Marcos Galperin (Mercado Libre), Marcos Bulgheroni (Pan American Energy Group), Martín Migoya (Globant), Facundo Gómez Minujn (J.P. Morgan), Javier Goñi (Ledesma), Agustín Otero Monsegur (San Miguel), Carlos Miguens (Patagonia Gold) y Verónica Andreani.
Ante la consulta insistente de si se uniría al espacio de Juntos por el Cambio, Milei volvió a rechazar cuando coalición que incluya al radicalismo y a la coalición cívica. “No puedo hablar con los radicales, que son la internacional socialista, o con la coalición cívica, que es un desprendimiento por izquierda. No puedo convivir con el ala blanda del Pro, que son kirchneristas de buenos modales. En la lógica de la democracia eso debería estar separado. No tienen que estar juntos. Esa es mi impresión, porque si no, vos no tenés mandato. En definitiva, es mentirle a la sociedad para tratar de ganar la mayor cantidad de votos posibles. Al político argentino le interesa más ganar la elección y tener cargos que venir a resolver problemas. A mí, por definición, me gusta resolver problemas como hice en el sector privado, que me pagan para eso y si no los resolvía, me ponían una patada en el traste”, dijo.
Luego reiteró que siempre estuvo dispuesto a converger con el expresidente Mauricio Macri y con Bullrich en un nuevo espacio político. “Dije de ir a una interna, y que si le tocaba ganar a esa ala, no tengo problemas de acompañar. Esto ya lo dije hace dos años. Creo que la política les debe a los argentinos un ordenamiento ideológico para que la gente sepa a quién vota. Todas estas coaliciones heterogéneas, primero que no se sabe lo que es y segundo, que es más grave, dejan inmóviles la gestión, porque unos quieren ir por un lado y otros, para el otro” dijo Milei.
En lo económico, al explicar cómo hará para reducir el déficit fiscal del estado, explicó que reduciría 13% del PBI el gasto del estado entre la eliminación de la obra pública y su reemplazo por el sistema iniciativa privada la chilena; la eliminación de las transferencias discrecionales a las provincias, y la quita de los subsidios económicos.
“Después está el tema de las empresas del Estado, que yo considero que hay que cerrarlas porque básicamente son un mecanismo por el cual la política se hace de caja destrozando empresas. Por último, queda la eliminación de las jubilaciones de privilegio, que eso ya entra en una línea más complicada. Pero hay que cortar el gasto”, concluyó.