WASHINGTON.- La Argentina deberá pagar la sentencia más dura posible por la estatización de YPF llevada adelante durante el último mandato de Cristina Kirchner por el entonces ministro de Economía, Axel Kicillof, luego de una fallo de la jueza Loretta Preska que obliga al país a cancelar al fondo Burford una cifra cercana a los US$16.000 millones.
El país aún tiene instancias de apelación, si bien el precedente en los estrados norteamericanos es muy malo.
Preska emitió una orden en la cual avaló los argumentos presentados por Burford y rechazó todos los pedidos presentados por los abogados de la Argentina, una decisión durísima contra el país que el Gobierno apelará para intentar morigerar.