Un insólito momento vivieron los asistentes de la misa de la Octava del Carmen de los Realejos, en la región de Tenerife, en España, cuando un hombre ingresó en la iglesia, corrió por el interior, se subió al altar y ubicó a su hijo frente a la virgen. La imagen se viralizó a través de un video difundido en las redes sociales que causó indignación.
El episodio sucedió el pasado domingo en la mocionada ciudad de la Isla Canarias ubicada en el Mar Mediterráneo, mientras se celebraba el acto religioso. Allí, de repente, una persona irrumpió en el edificio con un niño sobre sus hombros. Acto seguido, el hombre vestido con una remera blanca, un short gris y en ojotas corrió hacia el altar donde el padre realizaba la misa.
Tal como informó el diario español El País, el hombre sin dudarlo se subió al altar e intentó dejar al niño encima de una estatua de la Virgen del Carmen que yacía en el fondo de la iglesia. Luego, ante el desconcierto de los presentes, salió corriendo.
Sin embargo, aunque hizo varios intentos por dejar el niño donde estaba, fue interceptado por los creyentes para que no dejara al pequeño abandonado. Fue un feligrés quien lo agarró en brazos y lo acompañó durante el desconcertante momento.
No está claro cuáles fueron los motivos para tener ese comportamiento, pues parece que el hombre estaba fuera de sí y no podía controlar sus impulsos. Mientras iba por los pasillos de la iglesia comenzó a persignarse. Después empezó a orar y luego se arrodilló para pedir perdón por lo que había hecho enfrente al altar y la imagen de la virgen. En ese momento, fue aplaudido por los presentes en la iglesia.
Se desconocen los motivos que llevaron al hombre a actuar de esa manera y cuáles eran sus intenciones al dejar a su hijo sobre el altar.