SANTA FE.- Las lluvias volvieron a la zona conformada por el norte de esta provincia, el sur chaqueño y el sur santiagueño. Pero, después de un fin de semana prometedor en milimetrajes, como lo sucedido más al sur, los productores de esta vasta región aseguran que “el cambio de tiempo, con más ruido (truenos y relámpagos) que agua, no entusiasma”. En otras palabras, esto significa que lo que llovió desde el último fin de semana hasta hoy lunes, que para muchas zonas del país significó un cambio radical en la situación de sequía que se venía manifestando como alarma para el futuro productivos de la región, acá no se considera que vaya a provocar un giro de 180 grados en el actual cuadro que evidencian los campos.
En la zona no hay pasto, falta agua en los estanques, las lagunas siguen secas, y los animales –los pocos que quedan- salen a la venta por la mitad del valor habitual que se paga en los remates de hacienda. Esa es una realidad en miles de hectáreas en la amplia franja del sur de Santiago del Estero y su vecina Chaco, y los departamentos 9 de Julio, Vera y General Obligado, de esta provincia.
“Vuelve la posibilidad de soñar”: luego del alivio por las lluvias, prevén otra tormenta para las zonas agrícolas
El norte santafecino tendrá que seguir esperando las lluvias. Es que las precipitaciones fueron irregularidades en los departamentos más castigados por la sequía de los últimos tres años (9 de Julio, Vera y General Obligado), en el límite con Santiago del Estero y Chaco.
Consultado por LA NACION, Juan Cappozzolo, productor agropecuario de Reconquista, precisó: “Las lluvias de este fin de semana fueron un engañapichanga porque acá no cambió nada. Se mojaron los pastos pero los suelos no tuvieron la posibilidad de absorber agua como estamos necesitando”.
Esta tarde, se indicó a este diario, que las lluvias recientes en el norte santafesino, con un promedio de 30 milímetros en dos días, “son un regalo esperado que ha traído alivio a una región que enfrentaba desafíos significativos debido a la sequía. Esta precipitación beneficiará a la producción agrícola y ganadera, además de revivir los verdes característicos de la zona. A medida que la región se recupera, la esperanza y el optimismo crecen entre los habitantes del norte santafesino”, señalaron productores de la región que prefirieron el anonimato.
En otra zona de Santa Fe cerca al sur santiagueño, como la que encabeza la ciudad de Ceres, los registros de lluvias fueron apenas de entre 10 y 25 milímetros, “que no alcanzan para nada”.
“Seguiremos esperando. En cambio, hacia el centro del departamento San Cristóbal, nos encontramos con 85 milímetros en Aguará Grande”, añadió Martín Farías, desde el sitio Ceresciudad.com. Por último, en el departamento San Javier, al nordeste, las lluvias alcanzaron registros más importantes. En Costa del Toba llovió 70 mm, en Alejandra 40, Las Catalinas 30 y en Colonia Durán y Romang 20.
En Santiago del Estero
Tampoco tuvieron mejor suerte los productores de la zona que se conoce como la aledaña al límite tripartido que conforman el norte de Santa Fe y el sur del Chaco y Santiago del Estero. En este último caso, el departamento Rivadavia tampoco registró lluvias importantes. “Apenas 2 mm en Selva, 15 en Colonia Mackinley y 12 en Colonia Alpina (35 kms al sudoeste de Selva, la cabecera departamental). Sinceramente, no alcanza. Ahora vamos a esperar que se concreten los pronósticos que hablan de lluvias importantes para la región”, explicó a LA NACION el diputado provincial santiagueño, oriundo de Selva, Oscar Angel Don (Frente Cívico).
La zona de Santa Fe más cercana al sur santiagueño, como San Guillermo y Villa Trinidad (departamento San Cristóbal) tampoco hubo lluvias importantes. En la región los promedios fueron de 10 a 12 mm. “Nos dicen que no alcanzan para nada. Pero seguiremos esperando”, añadió un funcionario del gobierno santafecino. En tanto, sobre lo ocurrido en territorio chaqueño, los informes indican que “hubo sectores muy específicos donde cayó un poco más de agua, pero en general los registros son insuficientes”.
