Dos turistas estadounidenses fueron descubiertos este lunes dormidos dentro de la Torre Eiffel, en la ciudad de París, en un evidente estado de ebriedad, según informaron fuentes policiales.
Los dos intrusos fueron descubiertos por la madrugada, antes de la apertura al público, a las 9 (hora local), durante una inspección de rutina efectuada por los agentes de seguridad de la empresa SETE (por sus siglas en francés) que gestiona el famoso monumento parisino.
De acuerdo a la compañía, los turistas estaban entre el segundo y el tercer piso de la torre, en una parte no accesible al público y ”no representaban ninguna amenaza aparente”.
Según informaron fuentes policiales, los dos hombres habían pagado su entrada para el domingo cerca de las las 22.40 locales y pasaron las barreras mientras bajaban por las escaleras. “Habrían quedado bloqueados en el lugar debido a su alcoholización”, indicó la fiscalía de París sobre los dos turistas que debieron ser rescatados por los bomberos y efectivos de la unidad para sectores peligrosos.
Los dos hombres fueron llevados a la comisaría del distrito 7 donde fueron interrogados. La empresa SETE informó que tenía la intención de presentar una denuncia. ”No se constató ningún daño, la infracción por intrusión en un lugar histórico o cultural fue archivada”, declaró la fiscalía.
Tras el insólito episdoio la Torre Eiffel abrió al público hacia las 10 locales, una hora más tarde que normalmente. El monumento más famoso de Francia, que tuvo seis millones de visitantes el año pasado, tuvo que ser evacuado el sábado dos veces tras dos falsas alertas de bomba.
De nuevo esta mañana, tres comisarías parisinas volvieron a recibir un correo electrónico en el que se menciona la presencia de bombas en la Torre Eiffel, pero La Sete, siguiendo el consejo de la policía, decidió no desalojar el monumento.
Agencia AFP
