El Movistar Arena, ubicado en el barrio porteño de Villa Crespo, es el escenario elegido por Javier Milei para cerrar su campaña hacia las PASO. El líder de La Libertad Avanza es el primer precandidato presidencial en ponerle punto final a la carrera que tiene como meta el próximo 13 de agosto, cuando se dirimirán los nombres que competirán por llegar a la Casa Rosada.
Ese día se resolverá una de las mayores incógnitas que abrigó esta campaña: el volumen real de votos que es capaz de reunir el candidato libertario, que con sus vaivenes siempre apareció en el podio de las encuestas junto a los postulantes de Unión por la Patria y Juntos por el Cambio, pero que cosechó poco más que fracasos en las urnas de las provincias que adelantaron sus comicios.
En las últimas semanas, el economista recorrió las rutas del país en un motorhome, acompañado de otro vehículo que se llevó todas las miradas: un colectivo ploteado con su rostro y la leyenda “Milei 2023″. El primer tramo de su “tour de la libertad”, como denominó a la gira, tuvo como principales destinos a las ciudades de Rosario, Paraná y Córdoba. Pocos días después retomó viaje hacia Mar del Plata y Bahía Blanca, y finalizó su campaña itinerante con una visita relámpago a Mendoza.
Como había adelantado LA NACION, la decisión de dar un giro en su formato de campaña tuvo lugar luego de que sus estrategas admitieran que el recurso de la postal supuestamente “convocante”, con gente amontonada alrededor del diputado, se había agotado. Por eso la nueva apuesta, que consideraron un cambio radical: pasar de la “multitud” anónima al cara a cara.
El objetivo fue explícito: dejar atrás el formato de caminatas “encapsuladas”, replicado sucesivamente en las recorridas callejeras que protagonizó el dirigente libertario en los últimos meses. Ahora, la intención es mostrar a un Milei en mayor contacto con la gente y sin banderas “militantes” a su alrededor: en las imágenes difundidas a través de sus redes, se lo pudo ver al economista a los abrazos con distintas personas que se acercan al lugar y que, a priori, no pertenecerían a su espacio.
El mes y medio que transcurrió tras el cierre de listas no fue fácil para La Libertad Avanza. Las denuncias por supuesta “venta” de candidaturas en el espacio y su posterior repercusión judicial, con una investigación por “gravedad institucional” iniciada en los tribunales de Comodoro Py, puso en jaque el anhelo presidencialista de Milei. Sin embargo, los distintos sondeos de opinión lo muestran al libertario en torno al 20% de la intención de voto, un porcentaje nada desdeñable para una figura política inexistente hasta hace dos años.