Fernando Cerimedo fue acusado de muchas polémicas, algunas de las cuales confirmó él mismo. Aceptó coordinar “granjas de trolls” para fomentar la campaña de Javier Milei en redes sociales y de haber impulsado el movimiento que denunció el supuesto fraude en la elección de Lula da Silva contra Jair Bolsonaro, lo que desencadenó la toma del Palacio de Planalto en Brasil. Hoy se arroga la coordinación de la campaña digital del candidato libertario y, además de sus conocimientos y empresas, puso a disposición de La Libertad Avanza una importante suma de dinero: es quien más veces aportó, 20 en total, que suman $28.940.972.
Consultado por LA NACION, Cerimedo dijo que sus aportes figuran, en algunos casos, por duplicado. Esto sería así debido a que la página oficial absorbe datos de AFIP y de las declaraciones voluntarias ante la Comisión Nacional Electoral. Según su versión, sus aportes ascienden a $8 millones y medio y fueron hechos en especie. Él fue el que compró y ploteó el motorhome con el que Milei realizó parte de su campaña como precandidato a presidente. También pagó hoteles, pasajes, viáticos y comidas para las personas que viajaron con él. Respecto de por qué donó ese dinero, explicó: “Tenía ganas por mi esposa. No participa políticamente, pero es una militante de Milei”.
La millonaria cifra contrasta con el perfil comercial de Cerimedo, que hace un año y medio evidenció un cambio abrupto en su comportamiento financiero. Pasó de registrar movimientos comerciales, en su gran mayoría compras, por montos de entre $1.400.000 y $1.800.000 por mes a apenas $34.000 en el mes de julio, el último en el que se tiene constancia. El punto de quiebre entre sus resúmenes de tarjeta y los gastos mínimos de los últimos meses se dio en mayo del año pasado. Sin embargo, dijo a LA NACION que factura grandes sumas como consultor político (actividad a la que se asegura que se dedica hace más de 15 años) y es responsable inscripto ante la AFIP.
Aclaró que no cobra por ningún tipo de servicio a Milei. “Es ad honorem”, aseguró. Acotó que le había preguntado a la Comisión Nacional Electoral si debía registrar su trabajo voluntario o el de su productora de alguna manera y le contestaron negativamente.
Cerimedo figura también como dueño de un conjunto de empresas, entre las que está Uprod SRL, Academia Numen, Numen Publicidad y Sondeos, American Apps SA, de las cuales solo una muestra movimientos bancarios relevantes. Según él, en conjunto con su esposa, tienen cinco grupos empresarios. Además, tiene una relación de dependencia con la Fundación Pro del Instituto Universitario Escuela Argentina de Negocios, una casa de altos estudios en la Ciudad de Buenos Aires. Casi todas estas relaciones, que explicarían sus ingresos, surgieron a partir de 2020. Antes, había trabajado en el Gobierno de la Ciudad, en Digital House y en Europ Assistance, entre otros lugares.
Uprod SRL, que se dedica según su inscripción a los servicios de cinematografía y producción de filmes y videocintas, no registra movimientos desde febrero de 2022, unos meses antes de que se planchara la actividad crediticia personal de Cerimedo. Anteriormente, los montos de operación eran bajos: no superaban los $25.000. American Apps, abocada en los papeles a servicios de informática, programación y consultoría, presenta un panorama contrario. Entre febrero y abril de este año su actividad se triplicó, aunque sus movimientos no superan los $380.000 mensuales. Sin embargo, Cerimedo dijo que se desasoció de esta empresa, ya que “no prosperó”.
Otra línea de negocios de Cerimedo se llama Numen. Son dos sociedades, una de las cuales se dedica a la enseñanza desde 2021 y la otra, a publicidad y sondeos, desde 2020. Estas comparten dos similitudes y una diferencia. Ambas tuvieron problemas con sus obligaciones. En el último año incumplieron conjuntamente más de 17 veces en pagos a contribuciones a la seguridad social, aportes patronales y aportes de obra social. También registraron montos importantes en cheques rechazados. La academia Numen, por $1.663.750, de los cuales $907.500 aun no fueron recuperados y, la empresa de publicidad, por $6.059.519,60, todos en mayo de este año.
La gran diferencia entre las dos es que solamente la academia tiene movimientos de crédito relevantes. Aunque fue fundada en 2021, no tuvo actividad hasta marzo del año pasado. En febrero de 2022 tuvo $0 reportados por entidades bancarias y, el mes siguiente, percibió un explosivo crecimiento con cerca de $1.200.000. Cerimedo dijo que tienen 5000 alumnos, venden paquetes de capacitación a compañías y facturan cerca de $600 millones. La academia tuvo, a mediados del 2022, un pico de más de $4 millones en un mes. Mucho de lo que ingresa egresa en cheques. La rama de publicidad y sondeos, por el contrario, prácticamente no registra actividad. El mayor movimiento crediticio ocurrió en julio por $20.000.
Cerimedo, además, se adjudica ser dueño de La Derecha Diario, un portal de noticias con el que apunta a ser “el Héctor Magnetto de la derecha”, según dijo el mismo en una entrevista, y a través del cuál fue uno de los que gestionó la llegada de Tucker Carlson, un reconocido periodista estadounidense que vino al país para entrevistar a Milei. Figura como titular del dominio web de la página, pero no se le asocia ninguna empresa formalmente constituida. LA NACION consultó al propio Cerimedo, que aclaró que no es una empresa, sino que un “proyecto como un hobby”. “No tiene ingresos, los que escriben son estudiantes que lo hacen gratuitamente. Editan los artículos mi esposa y un chico más”, siguió. En Linkedin, La Derecha Diario figura con “11-50 empleados” y ocho usuarios aseguran trabajar ahí. Un colaborador consultado por este medio dijo que lo hace ad honorem. En su presentación de Twitter se refiere a otro usuario, “Pulso Popular”, como la encuestadora oficial del medio.