El Banco Central (BCRA) volvió a aprovechar hoy los últimos ajustes aplicados el pasado jueves al cepo para recomprar en el mercado US$60 millones en procura de alimentar sus muy necesitadas reservas.
Se quedó de este modo con el 18,6% de los US$322,4 millones operados en total la jornada de contado o el 76% de los US$78,7 millones que ingresaron por el dólar preferencial o soja, es decir, aquellos que está obligado a pagar a $300 por unidad.
“Compró US$79 millones a $300 y vendió US$19 millones. Eso da como resultado una compra neta de US$60 millones a un precio promedio de $321,57 por dólar (prorrateando la emisión sobre la compra neta)”, explicó como habitualmente hace el economista Salvador Vitelli, de Romano Group.
🇦🇷🌱RUEDA DÓLAR AGRO – 15/5/23BCRA compró u$s 79M a $ 300 y vendió u$s 19M en el MULC.Eso da como resultado una COMPRA neta de u$s 60M a $ 321,57 por dólar (prorrateando la emisión sobre la compra neta).🚨Acumulados:-Pérdida: $ 163.032M-Emisión: $ 301.252M (5,6% de la BM) pic.twitter.com/FJJJG4Qjkj
— Salvador Vitelli (@SalvadorVitell1) May 15, 2023
Se trata del segundo mayor monto adquirido a lo largo de la “racha compradora” iniciada el viernes 5, tras los US$101 millones captados el viernes, el día en que dejó de ceder reservas en intervenciones sobre el mercado mientras la actualización de sus datos de balance habían dejado a la vista que su tenencia neta había terminado abril negativa en unos US$1000 millones.
Además le permite elevar hasta los US$186 millones el neto recomprado en las última siete ruedas, aunque mantenga un saldo aún negativo de US$91 millones por este tipo de operaciones en lo que va del mes y en torno a los US$3000 millones en lo que va del año, lo que explica mucho de su frágil situación actual y de la batería de medidas aplicadas para tratar de podar aún más la demanda autorizada que debe pasar por el muy eufemísticamente denominado “Mercado Liber y Único de Cambios” (MULC).
La nueva compra llegó en una rueda en la que la expectativa estaba centrada sobre los posibles cambios en la política de administración del nivel del tipo de cambio, que acumuló en tiempos de la gestión Fernández un atraso de cercano a los 28 puntos porcentuales, según el Índice de Tipo de Cambio Real multilateral (ITCRM) que elabora el propio BCRA.
Ocurre que, luego de la reunión de urgencia que el equipo económico ampliado tuvo el sábado (tras conocerse el pésimo dato de inflación de abril), desde allí se había difundido que el BCRA “ajustaría las tasas” y “aumentaría la intervención en mercado de cambios” además de “administrar el ritmo del crawling peg”.
Dólar mayorista cerró a $ 230,30/230,70 por unidad, $ 1,50 arriba del cierre del viernes pasado
— Gustavo P Quintana (@guspaqui) May 15, 2023
Eso llevó a analistas y operadores a esperar un menor ritmo en el ajuste del dólar oficial (que aumentó 30,6% en lo que va del año, aunque la inflación acumulada hasta fin del último mes ya llegó al 32%), algo que no se verificó en la fecha si se tiene en cuenta que el dólar mayorista cerró a $230,70 por unidad para la venta, es decir, $1,50 por encima del cierre a $229,20 del viernes, es decir, subiendo a un promedio de $0,50 por rueda virtual (sábado, domingo y hoy), cuando venía de trepar $1,40 tras el fin de semana anterior y de subir en apenas $0,20 (0,09%) en la rueda pasada.
El recuento de datos surge porque LA NACION intentó, en vano, tener alguna “traducción” sobre la decisión oficial anticipada en la comunicación del sábado.
Así la cosas, seguirá el misterio sobre lo que el Gobierno intentó anticipar por los medios para operar sobre las expectativas y habrá que esperar algunas ruedas más para saber si esa afirmación neutra ocultaba alguna intención de dosificar más la suba del tipo de cambio o, por el contrario, avalar un ajuste al alza mayor para estar algo más en línea con los reclamos que en ese sentido realiza el FMI.