La división del FBI en San Juan, Puerto Rico, abrió una investigación luego de encontrarse una cámara escondida en uno de los baños del crucero Harmony of the Seas, embarcación propiedad de Royal Caribbean y uno de los más grandes en todo el mundo. De acuerdo a The Washington Post, más de 150 personas habrían sido grabadas sin su consentimiento, entre ellas 40 menores. Por el hecho fue detenido Jeremy Froias, un hombre casado y padre de dos niños.
Froias, que hasta esta semana trabajaba como oficial de seguridad cibernética en Kissimmee, Florida, se subió el navío el pasado 29 de abril para disfrutar de una viaje de una semana que iniciaba en Miami y tenía paradas en distintos puntos del Caribe como St. Maarten, San Juan y las Bahamas.
El barco puede albergar a 5.479 invitados con dos personas por camarote, o un máximo de casi 6.700.
Tras haber encontrado su habitación e instalarse, lo primero que hizo fue dirigirse hacia uno de los baños principales de la embarcación y colocar una cámara Wi-Fi. El hombre dispuso el artefacto por encima de la puerta de entrada, en una parte del cielorraso que había sido removida por reparaciones.
No fue hasta tres días después que un pasajero descubrió la cámara e informó sobre su hallazgo a la tripulación. Una vez confiscada, agentes de seguridad a bordo inspeccionaron el objeto tecnológico y encontraron grandes cantidades de videos grabados dentro de una tarjeta de memoria.
“El asunto se informó de inmediato a las fuerzas del orden locales y federales y las autoridades sacaron al huésped involucrado del barco para una mayor investigación. Como este es un caso activo, no podemos compartir más detalles en este momento”, señaló Royal Caribbean a través de un comunicado.
Los detalles de las grabaciones analizadas
De acuerdo a la declaración jurada a la que accedió el medio norteamericano, las grabaciones muestran primero muestran a Froias al momento de ocultar la cámara y cuando la ajuste para que apunte contra el inodoro. La declaración jurada dice que Froias parece haber conectado su iPhone a la cámara también.
“En primera instancia, se ve a personas entrando al baño para usar el inodoro o para cambiarse o quitarse los trajes de baño. Asimismo, la cámara de Froias capturó a estas personas en varias etapas de desnudez, incluida la captura de videos de sus genitales, nalgas y senos femeninos desnudos”.
John Auchter, agente del FBI con sede en San Juan, alegó que algunos de los menores que figuraban en los videos tenían entre 4 y 5 años.
Tras su arresto por video voyeurismo e intento de posesión de material de explotación infantil, el sujeto se declaró culpable de haber escondido la cámara. “Confesó darse cuenta de que lo habían descubierto después de que intentó encontrarla en el baño sin éxito”, precisaron desde el servicio de inteligencias.
Froias compareció ante el tribunal para una audiencia de fianza el pasado lunes en Puerto Rico. Un juez dijo que podría ser liberado con una fianza de USD 25.000 pero que necesitaría usar un dispositivo de monitoreo electrónico, entregar su pasaporte y limitar sus viajes a Puerto Rico.
Tampoco se le permitirá usar Internet ni tener contacto sin supervisión con ninguna persona menor de 18 años, incluidos sus dos hijos.