RESISTENCIA.- Marcela Acuña, la dirigente política y esposa del piquetero oficialista Emerenciano Sena, entró en el Juzgado de Garantías N° 3 a declarar en la causa por la desaparición y posible homicidio de su nuera, Cecilia Strzyzowski. Entró con casco y fuerte custodia.
La querella cree que Acuña fue la autora material del crimen. Tenía una relación extremadamente posesiva con su hijo de 19 años, César Sena, y rechazaba la relación que tenía con Cecilia.
Acuña, de 51 años, era candidata a intendenta de Resistencia en una lista colectora del Frente Chaqueño, que promueve la reelección del gobernador kirchnerista Jorge Milton Capitanich.
“¡Asesina!”, le gritaron desde la calle, mientras bajaba del móvil policial, rodeada por efectivos, en el garaje del juzgado.
Su declaración ocurre un día después de que Emerenciano Sena se presentó por primera vez en la causa a hablar sobre el caso de la joven de 28 años que fue vista por última vez el viernes 2 de junio. “Yo no fui, no estuve en el lugar”, declaró, según fuentes judiciales.
Cecilia entró a la casa de los Sena en la mañana del viernes 2, tal como captó una cámara de seguridad, y nunca más se la vio. Siete días después, un allanamiento en el lugar derivó en la detención del clan Sena: encontraron una sierra de carnicero con manchas de sangre, un machete y otros elementos que podrían incriminarlos.
Sena, aliado del gobernador peronista Jorge Capitanich, permanece detenido en la Comisaría 3° de Resistencia. Este martes a la tarde fue trasladado a los tribunales y mantuvo un encuentro con su abogado, Juan Carlos Saife. Después declaró por primera vez como imputado ante los fiscales Jorge Gómez y Nelia Velásquez.
“Declaró espontáneamente durante 10 o 15 minutos y no aceptó contestar preguntas”, dijo Saife al salir. El fiscal Jorge Gómez añadió: “Se lo vio entero”.
En paralelo, se conocieron las primeras imágenes de César Sena en su lugar de detención. Las publicó en exclusiva el Canal 9 de Chaco y se lo ve tras las rejas, con una bolsa con sus pertenencias y un aparato en las manos que parece un teléfono celular. El joven, que recién el lunes fue separado de su padre (estaban detenidos en el mismo lugar), también se declara inocente. Ahora, a través de su abogado, Ricardo Ozuna, pidió que le enviaran un sacerdote.
Las novedades en la investigación se suceden a ritmo frenético. Buzos tácticos de la policía de Chaco hallaron al mediodía del martes huesos triturados y otros elementos de relevancia en los rastrillajes que ejecutaron este martes en busca de pistas para determinar qué pasó con Cecilia.
El operativo se llevó a cabo en el río Tragadero. Los tres fiscales que llevan la investigación, Jorge Cáceres Olivera, Jorge Gómez y Nelia Velásquez, se movilizaron hasta el lugar para monitorear la acción. Se encontró también un dije en forma de cruz, similar a uno que usaba Cecilia.
Los funcionarios judiciales confirmaron la información pasadas las 15, en medio de una conmoción que no cede en la provincia. “Consideramos que estamos teniendo resultados muy positivos”, dijo la fiscal Velásquez. Los datos sobre el lugar habrían sido aportados por uno de los detenidos, Gustavo Obregón, colaborador del clan Sena que está imputado como partícipe de homicidio. A diferencia de otros operativos de la causa, esta vez el acusado fue llevado al lugar por la policía para colaborar con la búsqueda, lo que alimenta las expectativas de un avance decisivo en la investigación.
Obregón es una persona de máxima confianza del clan piquetero, a tal punto que hacía de chófer de César Sena cuando este iba al colegio secundario (se recibió en diciembre pasado). Está casado con Fabiana González, una empleada de Acuña que también fue detenida como partícipe del homicidio. Fuentes judiciales indican que habría confesado haber ayudado al joven a descartar el cuerpo de Cecilia.
Cerca del lugar de los rastrillajes del martes, agentes de criminalística y de la Fiscalía de Resistencia habían hallado el domingo una valija con rueditas y ropa que había sido quemada. También encontraron anillos y cadenitas. La evidencia es analizada para ver si pertenece a Strzyzowski. Fue en un descampado ubicado a unos 200 metros de la calle San Martín, que atraviesa el barrio Emerenciano.