SANTA FE.- Una polémica se desató en los últimos días entre los productores del norte santafecino afectados por la sequía que golpeó a la región en los últimos tres años, zona que, a pesar de las lluvias esporádicas de abril, no pudieron aún mitigar los graves perjuicios del fenómeno climático que, según datos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) trepa a US$5100 millones en esta provincia.
Pero hay otras consecuencias provocadas por la sequía: en el primer bimestre de 2023 Santa Fe exportó un 71,8% menos en productos primarios. Así, según cifras del Instituto Provincial de Estadísticas y Censos (Ipec), los volúmenes cayeron un 88% interanual en el trigo y un 27% en el maíz, con una diferencia de 329.200.000 dólares menos comparando exportaciones de productos primarios.
La siembra de trigo, muy dependiente del clima de las próximas semanas
Según informes aportados a este diario por productores del norte santafecino, próximos al límite con la provincia de Chaco, la sequía se atemperó “un poco”, pero sus efectos continúan. Es más, en los próximos cinco meses se definirá el futuro de la región, teniendo en cuenta que los productores perdieron tres campañas.
Hoy no es posible sembrar para tener pasturas que alivien el invierno y, además, todo este proceso llevó a reducir más del 50% la cantidad de vacunos de cría que había en esa zona porque se interrumpieron los esquemas de envío de cisternas con agua para atender los requerimientos, principalmente en los departamentos 9 de Julio y Vera. Como contó LA NACION en diversas notas, los productores de la zona informaron sobre una importante mortandad de animales.
Polémica y reunión
La polémica se reavivó días atrás cuando se reunieron los integrantes de la Asociación de Pequeños Productores de la Cuña Boscosa, que preside Yolanda Arce, donde se realizó un detallado informe de las gestiones para lograr las acciones que permitan mitigar las consecuencias de la sequía.
Aunque se reconoció que habrá próximamente una nueva entrega de alimentos balanceados a socios, “los más de 60 productores presentes también realizaron una nota para el ministro (de la Producción, Daniel) Costamagna, para interiorizarlo que no reciben más el transporte de agua hasta los campos. Cancelaron el transporte de agua sin justificativo”, remarcó el comunicado.
Pero durante la reunión, los productores denunciaron que “en muchos casos hacían figurar que enviaban 3 camiones con agua y solo llegaba 1. En muchos casos tiraban agua en las cunetas. El problema sigue siendo de todos pero mucho más de esa gente que tiene pequeñas explotaciones en zonas muy alejadas”, dijo a este nedio Juan Capózzolo, productor radicado en la zona de Reconquista.
Respuesta oficial
En tanto, desde el Ministerio de la Producción de Santa Fe, y ante una consulta de LA NACION, se reconoció que los departamentos 9 de Julio y Vera (en el norte de la provincial) “han sido una de las regiones más dañadas por sus efectos, que impactaron especialmente a la producción ganadera”.
Pero “en ese marco, la provincia ya dispuso alrededor de $420 millones para acompañar a los pequeños y medianos productores en esta región. De este monto total, $145 millones para el acarreo de agua y limpieza de represas, $160 millones en créditos a tasa cero, $55 millones en aportes no reintegrables y $60 millones para la compra de tanques cisternas”.
Además, dijeron sus voceros, se trabaja de manera articulada con la Asociación para el Desarrollo 9 de Julio y la Sociedad Rural de Vera, y se asistió a más de 1000 pequeños y medianos productores ganaderos, por un monto total de 145 millones de pesos. Esta asistencia alcanzó al 20% del stock de ganado de ambos departamentos (más de 250.000 cabezas de ganado).
El acarreo de agua involucró el transporte de aproximadamente 55 millones de litros de agua y más de 1000 viajes mediante camiones cisternas para asistir a productores de hasta 400 cabezas de ganado. En relación a la limpieza de represas se acondicionaron más de 200 con el objetivo de mejorar el almacenamiento y la provisión de agua para los animales.
El informe destacó que en el caso de los aportes no reintegrables, se entregaron más de 560 subsidios a pequeños productores ganaderos afectados por la sequía por un monto total de $55 millones. Los aportes fueron destinados para la adquisición de alimentos y provisión de agua.
Por otra parte, se otorgaron más de $160 millones en créditos a tasa cero, con hasta un año de gracia a más de 330 pequeños y medianos productores ganaderos. Esta línea de asistencia financiera se ejecutó a través de las asociaciones para el desarrollo en las cuales se constituirán fondos rotatorios, y fue destinada a la compra de alimentos, insumos y servicios para la implantación de pasturas, pago de servicios para la provisión de agua y limpieza de represas, y mejoras en el aprovisionamiento de agua.