CIUDAD DE GUATEMALA.– En una medida que elevó la preocupación de la comunidad internacional por el desarrollo del proceso electoral en Guatemala, la Corte de Constitucionalidad dejó afuera de los comicios presidenciales del 25 de junio próximo al candidato Carlos Pineda, que según las encuestas lidera las preferencias de los votantes. El empresario se convirtió así en el tercer candidato en quedar excluido de la contienda para definir al sucesor del presidente Alejandro Giammattei.
En un comunicado de prensa, el tribunal declaró el viernes que rechazó las apelaciones de Pineda, del partido político de derecha Prosperidad Ciudadana, en contra de un amparo solicitado por el partido Cambio que alegó que hubo irregularidades en la asamblea en la que se eligió a Pineda como candidato.
Tras conocerse la noticia, Pineda, de 50 años, tuiteó: “Ganó la corrupción, perdió Guatemala. No al fraude electoral”.
#VotoNulo pic.twitter.com/IxLD90oQbB
— Carlos Pineda (@72_cpineda) May 26, 2023
“Prevaleció la cooptación del Estado, el reino de la corrupción y la dictadura, es increíble, me siento como muerto”, añadió el candidato. Cuando falta menos de un mes para las elecciones su participación ya no es posible.
Pineda, un empresario con negocios en agricultura y transporte, contaba con el 22% de las intenciones de voto, de acuerdo a un sondeo publicado el miércoles por Cid Gallup y realizado con entrevistas cara a cara a 1204 personas a nivel nacional. En el sondeo previo de Gallup, realizado en febrero, Pineda ocupaba el sexto lugar con el 3% de intención de voto.
Pineda, quien participaba por primera vez en una campaña presidencial con un discurso anticorrupción y criticando a los políticos tradicionales, es seguido en los sondeos por Sandra Torres, candidata nuevamente por la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), quien mantiene el segundo lugar en las preferencias, con un 20%.
La víspera, la Corte también revocó la inscripción de Roberto Arzú, otro candidato de derecha que se postulaba a la presidencia, mientras el país centroamericano es blanco de críticas ante lo que algunas organizaciones ven como un riesgo de un proceso electoral inequitativo.
El primer partido en quedar afuera de la contienda fue el Movimiento para la Liberación de los Pueblos, una fuerza de izquierda que postulaba a Thelma Cabrera, a quien las autoridades electorales le negaron la inscripción bajo el argumento de que a su compañero de fórmula y aspirante a la vicepresidencia, Jordán Rodas, le faltaba un documento que garantizaba que no tenía cuentas pendientes con el Estado.
La Unión Europea (UE), Estados Unidos y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos han manifestado su preocupación por la exclusión candidatos y han pedido al Estado guatemalteco garantizar los derechos políticos, el pluralismo y la participación en condiciones de igualdad en el proceso electoral.
HRW, la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA) y la organización Robert F. Kennedy Human Rights (RFKHR) expresaron el miércoles su preocupación porque consideran que el proceso electoral se da en “un contexto de deterioro de los derechos humanos, civiles y electorales”.
En abril, subsecretario del Departamento de Estado de Estados Unidos para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian Nichols, afirmó que “la democracia depende de que todos los ciudadanos elijan a sus líderes entre todos los candidatos cualificados sin barreras arbitrarias, exclusión o intimidación”, en alusión a los comicios guatemaltecos.
El 25 de junio será elegido en las urnas el sucesor de Giammattei, a quien la oposición acusa de reprimir a jueces, fiscales, periodistas y activistas, algunos de los cuales han abandonado el país. Si ninguno de los candidatos logra más del 50% de votos, habrá un ballottage en agosto.
Agencias AP y Reuters