Jack Butcher es diseñador gráfico y emprendedor. A lo largo de los años, construyó una gran comunidad en Twitter e Instagram (en la cuenta @visualizevalue) que no solo lo sigue, sino que compra sus productos, como cursos y recursos gráficos para explicar, simple, temas complejos con extrema creatividad y simplicidad, algo tan necesario en tiempos de sobreabundancia de información y estímulos que compiten por nuestro atención.
Butcher ayuda a identificar cuáles son esos activos que tenemos y por las que hay un público dispuesto a pagar. Su lema es “Build once, Sell twice”, de modo que el esfuerzo que invirtamos en desarrollar nuestra propuesta de valor, garantice un retorno fecundo. Primero, hay que validar que hay una demanda para lo que ofrecemos y Butcher dice que si alguna vez recibimos un pago por eso, por pequeño que sea, lo hay. Entender quién es ese público nos orienta para entender dónde y en qué tenemos que poner nuestro esfuerzo y también en dónde no gastar tiempo y energía. Esto es importante cuando nos “enredamos” y sentimos que es nuestro deber aprender de todo y que nunca es suficiente conocimiento para empezar. Construir, lanzar, medir y a partir de los resultados corregir o redoblar la apuesta. La mejor manera de validarnos es “en la cancha”. Para el diseñador, una curiosidad verdadera, una escucha humilde y una adaptación de ese saber a “tus maneras” hacen la diferencia y, agrega, que ser curiosos es una habilidad que se puede cultivar, en tu aproximación a las personas y a las cosas. Además, explica que eso que te genera curiosidad, podés combinarlo con tus principales saberes y de esta manera desarrollar “tu nicho singular”. Por ejemplo, a mí me interesa y genera curiosidad la ciencia, el alcance de las nuevas tecnologías, la evolución del liderazgo, la organización del trabajo, que combino con algunas de mis competencias como escribir, comunicar de manera efectiva, simplificar temas complejos a públicos generales y a todo eso combinado con mi tono y mirada, genera un contenido nuevo que, algunos, encuentran valioso.
Por qué la brújula es mejor que el GPS
Es importante escuchar los “pequeños indicadores” que demuestran que vamos por un buen camino. Por ejemplo, en los contenidos digitales, puede ser muchos comentarios positivos, un ratio alto de apertura de un newsletter o que la gente empiece a compartir tus contenidos de manera orgánica. Butcher dice que podemos medir la calidad de nuestra oferta basados en qué tan fácil es recolectar pruebas sociales de su valor. Si tenés que rogar por aceptación y atención, es hora de mejorar el producto. En cambio, si las personas te dan feedback y apoyo voluntario, hay que levantar aún más el volumen de lo que hacemos. “Hacé ruido y escuchá la señal. No sabés lo que va a resonar con tu audiencia hasta que publiques. Tuiteá 100 veces, encontrá evidencia del tipo de contenido que le gusta a tu audiencia”, dice. Como dice el inversor Naval Ravikant “Escapa a la competencia a través de tu autenticidad”.