El juez federal Marcelo Martínez de Giorgi seguirá el frente de la causa en que se investigan sobrescritos realizados sobre dos de los “cuadernos de la coimas”, en segmentos en los que se refieren al empresario Armando Loson, uno de los acusados en el caso.
El juez de la Cámara Federal Mariano Llorens decidió mantener a Martínez de Giorgi al frente de esa investigación y rechazó la recusación para apartar al magistrado que había planteado Jorge Bacigalupo, el amigo del remisero Oscar Centeno que entregó al periodista de LA NACION Diego Cabot los cuadernos donde está anotado el recorrido realizado por funcionarios del Ministerio de Planificación para cobrar coimas y llevarlas, entre otros lugares, al departamento en el que vivía Cristina Kirchner, en Recoleta.
Bacigalupo planteó que existe una amistad entre Martínez de Giorgi y Miguel Ángel Plo, María Jesús Plo y Federico Carlos Zupicich, que están investigados en el caso de los cuadernos de las coimas y “a quienes el juez admitió conocer” y mantener con ellos “un trato frecuente”, advirtió Bacigalupo.
Pero el camarista Llorens entendió que una cosa es el expediente principal por asociación ilícita y sobornos, que ya está elevado a juicio, y otra este expediente donde se investiga quiénes pudieron haber realizado esos sobrescritos sobre algunos de los cuadernos.
Llorens dijo que lo que debe analizar es “el grado de conexión entre ambos expedientes” y la influencia que pueda tener lo que se resuelva en este caso de las enmiendas sobre el caso principal. “El eje sobre el cual se encaminó la recusación se basó en un vínculo personal entre el juez y otras personas que no son partícipes de este proceso ni del objeto que está llamado a develar”, dijo Llorens.
“La amistad íntima invocada” y “el interés directo en el proceso se desvanece desde el momento en que las personas involucradas en esa relación no tienen ningún grado de participación en la presente investigación”, dijo el camarista.
Loson, con un peritaje, estableció que hubo tachaduras y enmiendas en dos de los cuadernos en párrafos donde se menciona su nombre o su empresa. Un peritaje oficial lo corroboró. Martínez de Giorgi busca al autor de esas enmiendas. Realizó otro estudio sobre la letra y sospechó de Bacigalupo. Por eso, allanó su casa y secuestró “cuerpos de escritura” realizados por él para compararlos con los sobrescritos.
La Cámara Federal de todos modos ya rechazó cualquier nulidad intentada por Loson para descalificar a los cuadernos como prueba por estas enmiendas. Dijo la Cámara que hay numerosas evidencias en los cuadernos, mas allá de estas anotaciones, donde están mencionado el empresario y compañía.
Pero la apertura de esta acusa donde se cuestiona la prueba de los cuadernos ya provocó airados reclamos en los tribunales, sobre todo de la fiscal de juicio oral Fabiana León, que debe juzgar a Cristina Kirchner y a otro centenar de personas por el pago y cobro de sobornos y por asociación ilícita.
La fiscal dijo que la causa de Martínez de Giorgi es una intromisión en su caso y que en todo caso se busca poner en riesgo su investigación. Sostuvo que cuando cualquier peritaje sobre los cuadernos debe hacerse en el maro del juicio oral y no en un expediente paralelo.
“Los únicos sujetos llamados a intervenir en este proceso son los jueces del Tribunal Oral Federal N° 7 y esta fiscal. Por supuesto, con las instancias de revisión. Como representante de los intereses de la sociedad, mi esfuerzo desde el primer momento se endereza a realizar el debate en el que todas las partes expongamos nuestras pruebas y nuestras pretensiones de cara a la ciudadanía. Esto es lo que establece la Constitución y solo a ella nos subordinamos”, dijo la fiscal León.
Ahora seguirá la investigación para determinar quién sobrescribió los cuadernos, cuestión que las defensas van a aprovechar para intentar cuestionar esas pruebas antes de que comience el juicio oral y público.
