CÓRDOBA.- El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, y el de Salta, Gustavo Sáenz, se sumaron al listado de los mandatarios que no pagarán el bono de $60.000 a los estatales que impuso el ministro de Economía, Sergio Massa. De esta manera, ya son 14 las provincias que no adhieren a la medida anunciada por el ministro y candidato a presidente de Unión por la Patria. Los mandatarios provinciales insisten que la decisión no fue consultada y que solo la habían hablado unos días antes del viaje de Massa a Washington, aunque se trató solo como “una mención” en el marco de una serie de propuestas, “sin ninguna precisión”.
“Tomamos medidas con anterioridad” señaló el ministro de Gobierno de Chaco, Juan Chapo, para precisar por qué la provincia no adhiere a la medida nacional de pagar $60.000 en dos cuotas para los asalariados que perciban un sueldo inferior a los $400.000 netos. “Se tomaron decisiones antes de los anuncios. Esas decisiones fueron definidas con los mismos gremios del sector público”, indicó el funcionario de Capitanich. Es el mismo argumento que esgrimen en la mayoría de los distritos, porque ya cerraron o están discutiendo paritarias para los últimos meses del año.
Ricardo Villada, ministro de Gobierno de Salta, sostuvo: “Si nosotros no tenemos para afrontar una ayuda extraordinaria de estas características, sin ayuda de Nación, imagínese los municipios. Vamos a ver si avanzamos en un esquema de compensación de la inflación, o si planteamos un esquema de remuneración fija”, describió, y supeditó la decisión a la discusión paritaria.
Hasta ahora son tres las provincias que se alinearon con el pedido de Massa; La Rioja,Santiago del Estero y Mendoza. Más allá del pedido público de Massa a intendentes y gobernadores, en reuniones y contactos privados, el candidato les viene reclamando a los mandatarios oficialistas “más compromiso” con su campaña electoral. En las PASO perdió en distritos donde, en elecciones provinciales, el oficialismo se impuso.
Un tema no menor es que, a diferencia de lo que sucede a nivel nacional, donde unos 390.000 empleados recibirán el bono, en las provincias y municipales los sueldos netos debajo de los $400.000 son la mayoría y el peso presupuestario de otorgar un refuerzo es significativo, ya que la partida de personal representa en promedio 60% del gasto. Mientras tanto, quedaron expuestos a las presiones de los gremios, más allá de que todos tienen ya un sendero paritario en curso.
Los gobiernos de Santa Fe, Córdoba, Misiones, Ciudad de Buenos Aires, San Juan, La Pampa, Entre Ríos, Neuquén, Jujuy, Catamarca, Tucumán y Santa Cruz plantearon directamente que no analizan el pago porque están en diálogo con los estatales o ya firmaron acuerdos que están vigentes.
El ministro de Trabajo santafesino, Juan Manuel Pusineri, dijo que la decisión ya está tomada, y agregó: “Aplicamos un acuerdo paritario”. En la misma línea, el vicegobernador sanjuanino, Roberto Gattoni sostuvo: “Acabamos de otorgar un aumento a los empleados públicos y creo que al bono hay que compatibilizarlo con los acuerdos paritarios”.
“La provincia no prevé otorgar sumas fijas a empleados y empleadas estatales. La totalidad de los trabajadores y trabajadoras están bajo convenios colectivos y se acordó en paritarias con todos los gremios”, confirmó el gobierno neuquino en un comunicado.
Julio César Comello, secretario de la Gobernación de Córdoba, explicó que el aumento salarial ya otorgado a los trabajadores del sector público garantiza que ningún empleado recibirá un incremento menor a $33.000, por lo que no habrá bono. El ministro de Hacienda y Finanzas jujeño, Carlos Sadir, señaló que su provincia no tiene “las posibilidades para hacer frente a ese pago, salvo que el Gobierno Nacional envíe los fondos” y repasó que viene trabajando en un esquema salarial totalmente diferente a la administración central “con fuertes incrementos, inclusive con la inflación acumulada del 60%; todos los sueldos de los agentes provinciales y municipales están por arriba de esos valores”.
El ministro de Hacienda de Misiones, Adolfo Safrán, sostuvo que mantendrán los aumentos pactados -se negocia cada dos o tres meses- y no otorgará el bono extra. Sergio Ziliotto, gobernador de La Pampa, enunció que hace cuatro años garantizan cláusula gatillo por encima del nivel de inflación: “Vamos a hacer el mayor esfuerzo que podemos”; en la misma línea habló el entrerriano Gustavo Bordet, quien enfatizó que en su distrito están varios puntos “por encima de la inflación”. Catamarca, Tucumán y Santa Cruz están negociando paritarias y CABA argumentó que revisa permanentemente los salarios.
El gobernador bonaerense Axel Kicillof -quien salió a apoyar los anuncios- plantea que “algo van a hacer”, pero todavía no dio precisiones. Aunque sí advirtió que la gestión provincial no se hará cargo del bono de los 135 municipios bonaerenses.
Las autoridades de Río Negro indicaron que, por ahora, “no hay decisión tomada”. Corrientes ya pagó un bono. San Luis, Chubut y Tierra del Fuego cerraron hace pocos días las paritarias para este tramo del año.
Con la colaboración de Eduardo Ledesma