LA PLATA. – En el día del estudiante, Sergio Massa y Axel Kicillof revindicaron las políticas del gobierno en materia de educación y buscaron diferenciarse de Javier Milei y Patricia Bullrich, los principales referentes de la oposición. En sendos discursos destinados a captar el voto juvenil, los candidatos a presidente y a gobernador por Unión por la Patria (UP) defendieron la entrega de computadoras, la universidad pública y los viajes de egresados financiados por el gobierno.
Massa fue más allá: “No quiero que los pibes vayan a la escuela armados porque existe la libre venta de armas en la Argentina. Quiero que el Estado les garantice la seguridad. Que los pibes vayan con su notebook en la mochila, no con su arma. Eso es lo que tenemos que defender hacia adelante”, dijo el ministro de Economía al diferenciarse de la propuesta de libre portación de armas de Milei, aunque desde La Libertad Avanza (LLA) la relativizaron en las últimas semanas.
Los dos aspirantes de UP hablaron en el Gran Buenos Aires. Massa estuvo en Quilmes junto a la intendenta camporista Mayra Mendoza. “Hoy en el día del estudiante, quiero decirles además de feliz día, que hoy es tiempo de rebelarse, pero no desde un posteo en la red social, sino defendiendo lo que es propio, como las becas Progresar que permiten a 7 millones de pibes ir a estudiar. También contra aquellos que dicen que el Estado no tiene que darles las computadoras”, remarcó.
“La libertad no es que los manden a trabajar sin derechos. Es tiempo de rebelarse contra aquellos que los quieren formar en un número en la economía, contra los que les quieren cobrar la universidad. Hoy se las quieren cobrar, arancelar, les van a dar un voucher. Es tiempo de defender la universidad pública, libre, gratuita de calidad. Los que otros proponen como rebeldía es condenarlos a que cada uno se arregle como pueda”, advirtió Massa en clara referencia a Milei, el candidato más votado en las PASO.
“Esto no es populismo”
Por su parte, el gobernador Kicillof también se subió a la pelea presidencial para defender las políticas de educación. No sólo hace campaña a favor de Massa para sostener al candidato a presidente de UP, sino también porque sabe que en caso de ganar Bullrich o Milei y él retiene la Provincia, no dispondrá de dinero para sostener algunas de sus políticas como viajes de egresados o reparto de computadoras.
Durante la inauguración de la escuela primaria N°29 en el partido de Ezeiza, Kicillof apuntó contra Juntos por el Cambio: “Estoy esperando que (Mauricio) Macri, que Bullrich y que (María Eugenia) Vidal pidan perdón”, dijo. La mención llegó durante un discurso donde advirtió que “no hacen falta menos sino más universidades”. Y revindicó la política de entrega de computadoras por parte del Estado: “Cuando llegué a la provincia no entregaban más computadoras. Nosotros ya terminamos de entregar 130 mil y van a ser 170 mil”.
“Nos critican a nosotros, pero estoy esperando que Macri, Bullrich, Laretta, Vidal y (Cristian) Ritondo pidan perdón por las computadoras que no le dieron a los pibes. No pagaban ni las licencias de las que ya se habían distribuido”, fustigó. Y abundó: “Hoy escuchamos a los dirigentes de la oposición que no va a haber más viajes de egresados ni más universidades. Que no va a haber más computadoras. Es más, si ganan las que ya entregaron dejarán de funcionar. Sépanlo muy bien, esto es así”.
“Esto no es populismo, clientelismo, ni despilfarro. Todos nacemos iguales, con mismas oportunidades, más allá de la cuna”, dijo Kicillof en un acto junto a Gastón y Dulce Granados, ante quienes revindicó el avance de una ley que pretende traspasar a la universidad de Ezeiza al ámbito nacional.
El traspaso no prevé las autoridades actuales de la casa de estudios creada en orden provincial en 2019. El rector fue reelegido ante un intento desesperado e infructuoso de Granados de aprobar antes la ley que nacionalice esa casa de estudios. El traspaso a la órbita nacional sin sus actuales autoridades es -según la oposición- una avasallamiento a la autonomía universitaria y a la ley de educación superior. El debate, en este caso, podría llegar hasta la Corte Suprema de Justicia de la Nación.