Decididos a darle un envión a la campaña presidencial del ministro de Economía Sergio Massa, el oficialismo acelerará a fondo en la Cámara de Diputados el debate del proyecto que modifica el impuesto a las Ganancias. La iniciativa se presentó hoy y el objetivo es darle media sanción el martes próximo: todo un trámite exprés que, advierte la oposición, responde a las urgencias de la campaña.
El doble propósito del oficialismo es claro: ofrendarle un trofeo electoral al ministro candidato (se estima que el alivio fiscal, de aprobarse la ley, alcanzará a unos 700.000 trabajadores) y colocar en un brete a la oposición. ¿Qué argumento esgrimirá Juntos por el Cambio para no votar una rebaja de impuestos, su latiguillo de campaña? ¿Cómo votará el ascendente Javier Milei, el líder libertario? ¿Acompañará a Massa en su proyecto o votará en contra, aun cuando contravenga los intereses de un universo potencial de votantes?
“Todavía no hemos tomado una decisión”, fue la respuesta del comando de campaña de Milei ante la consulta de LA NACION.
Los diputados de Juntos por el Cambio, en tanto, anticiparon que votará en contra. Así lo decidió la cúpula del interbloque tras reunirse con el equipo de economistas de Patricia Bullrich, la candidata presidencial de la coalición opositora. Planteará esta postura mañana en la Comisión de Presupuesto.
Los legisladores señalaron que la medida obedece a una “desesperación electoral” del Gobierno “impulsando una baja de impuestos para algunos sectores sin ninguna baja del gasto público” lo que, a su juicio, “implica que será financiado íntegramente con emisión monetaria, es decir con más inflación.”
“Nosotros no vamos a acompañar el peligroso camino a la híper inflación a la que nos está llevando el ministro y candidato Massa -anticipó el diputado Mario Negri, jefe del bloque radical- No tiene conciencia a dónde está arrastrando el país. O quizás sí y piensa que explote todo al que viene”.
“Nosotros sí estamos a favor de la baja de impuestos, pero no es a la que te criaste, no es tirando todos los días una iniciativa. Hace dos horas Massa rompió la última piñata, para que caiga la plata del Estado -que queda muy poca- al servicio de su candidatura. País fundido para un ministro que funde al país. Nuestra lucha, ministro Massa, es la lucha contra la inflación, lucha que usted no dio. La inflación no hace presidentes, solo fabrica pobres”, asestó Negri.
Posibles aliados
Sin el apoyo de Juntos por el Cambio, el oficialismo deberá apelar a eventuales aliados para conseguir el quorum de 129 diputados sentados en sus bancas para arrancar la sesión. Hará lo previsible: incluirá el proyecto de Massa dentro de un temario más amplio de iniciativas que les sean tentadoras de votar. Hay varias pendientes: la creación de ocho nuevas universidades; la prohibición para privatizar la empresa Aerolíneas Argentinas y la ampliación de licencias parentales y laborales, entre otras.
A los diputados más renuentes, aquellos que temen una poda en los ingresos coparticipables con la reforma en Ganancias, Massa buscará disuadirlos con un as que tiene en la manga: les propondrá que se coparticipe otro impuesto cuya recaudación hoy retiene enteramente la Nación. Ayer el ministro recibió en su despacho a diputados y senadores de un bloque provincial, tradicionalmente aliado: con ellos barajó la posibilidad de ampliar la coparticipación del impuesto al cheque o bien se reparta con las provincias la recaudación de bienes personales o del impuesto PAIS.
El proyecto enviado por Massa y que comenzará a discutirse en la Comisión de Presupuesto tiene como objetivo gravar los ingresos que superen un monto equivalente a a 15 salarios mínimos, vitales y móviles “conforme el monto que esté vigente al 1° de octubre de 2023″. Según estimó el Ministerio de Economía, esto equivaldría a $1.770.000. Asimismo, se incorpora una escala progresiva para estos mayores ingresos, cuyas alícuotas oscilan entre el 27% y el 35 %.
De aprobarse, solo 88.000 contribuyentes quedarían sujetos al impuesto, “lo que representa menos del uno por ciento (1%) del total de las remuneraciones, jubilaciones y pensiones”, afirma el texto. La propuesta también detalla cambios en varios artículos de la ley vigente, incluyendo excepciones para ciertos cargos públicos y directivos de empresas, así como nuevas escalas de tributación basadas en salarios mínimos.
Entre los puntos más destacados, en el Artículo 3, exime al salario anual complementario, o aguinaldo, del tributo. Al analizar la propuesta de Massa, el jefe del bloque oficialista Germán Martínez remarcó que con los cambios en el impuesto a las ganancias “hay un billón de pesos que quedará en manos de los trabajadores y se volcará al mercado interno”. Por otra parte, estimó que “para cuando en Diputados tratemos el tema de Ganancias, va a ser acompañado con una movilización de los trabajadores”.