Con la premisa de que las primeras decisiones de un presidente marcan el ADN de lo que será su gestión, la candidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, sintetizó en un libro las medidas más urgentes que planifica para su primer día de gobierno, en caso de llegar a la Casa Rosada.
“De un día para otro” es el título del libro, editado por Sudamericana, que Bullrich presentará el jueves, a las 17.45, en el salón de actos de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA), para revelar las medidas que proyecta con el fin de “cambiar de verdad en las primeras 24 horas de gobierno”.
Desgrana allí las medidas que ejecutará para eliminar la burocracia y la corrupción, afrontar el flagelo de la inseguridad, impulsar una rebaja de impuestos, sin por ello perder financiamiento, mejorar la educación y definir por dónde comenzar a recortar los gastos del Estado, como los viajes innecesarios de funcionarios de segunda y tercera línea, entre otros temas. Para ello promete aplicar rigurosos criterios de orden, austeridad y eficiencia, con un uso inteligente de los avances tecnológicos, como herramienta novedosa.
“Es hora de acabar con las numerosas comitivas que acompañan a un ministro o a un secretario de Estado cuando viajan al exterior. Fuera de los empleados imprescindibles para dar asistencia o negociar un acuerdo, todo colado pesa indebidamente en el bolsillo de los argentinos”, plantea la candidata presidencial en el libro, al transmitir la “indignación” que producen los gastos innecesarios del Estado.
Recuerda, en ese sentido, que en los primeros siete meses de 2022 el Estado gastó casi $3000 millones en pasajes, lo que proyecta una erogación de más de $6200 millones para todo el año. A ello se suman unos $6358 millones en viáticos. “Entre pasajes y viáticos, los funcionarios públicos cuestan al bolsillo de los ciudadanos alrededor de $13.000 millones, únicamente para sus traslados a otros países o ciudades”, alerta en su libro la exministra de Seguridad.
Para erradicar esta práctica, Bullrich propone “cortar esta sangría el primer día: puede hacerse por decreto presidencial”. Y subraya: “Quien quiera conocer lugares de nuestro planeta, que lo haga con su plata”.
En el mismo sentido, arremete contra las numerosas comitivas que viajan al exterior. En el libro pone como ejemplo el viaje a la Cumbre de las Américas, celebrada en Los Ángeles en 2022, adonde el presidente Alberto Fernández concurrió con el canciller, pero también con la ministra de Salud, la portavoz oficial, el secretario general de la Presidencia, el secretario de Asuntos Estratégicos, la secretaria Legal y Técnica, la secretaria de Cambio Climático, el jefe de Gabinete de Asesores y un diputado. “El vuelo costó 449.000 dólares, ya que utilizaron un jet de Aerolíneas Argentinas”, precisa la candidata de Juntos por el Cambio, al prometer revertir esta tendencia.
Y anticipa una revisión de criterios. “Excepto los ministros y las jerarquías equivalentes que encabecen grandes áreas del Poder Ejecutivo Nacional, y esto siempre que se dirijan a cumplir con una misión autorizada, no hay razones para que otros funcionarios vuelen en la clase ejecutiva. De paso, esto también ayudaría a que cada uno piense muy bien si el viaje vale la pena”, señala la candidata.
Bullrich encuentra una explicación frente al elevado dispendio de recursos. “Somos muy generosos cuando el dinero pertenece a otro y ni qué decir cuando procede de millones de personas no identificadas”.
“Menos irritantes que los viajes, pero también fuente importante de gastos –añade la candidata presidencial-, son los teléfonos celulares y hasta los de línea. El Estado nacional gasta en comunicaciones telefónicas más de $2700 millones, a valores de 2022. Como mínimo, deben suprimirse los teléfonos móviles a cargo del Tesoro Público, con excepción de los que se suministren a determinados funcionarios por motivos de seguridad o inteligencia”.
Al presentar sus propuestas, la autora se pregunta si es posible combatir la inseguridad, a pesar de la existencia de “jueces garantistas” y de la insuficiencia de cárceles. Además, advierte sobre el auge de los piquetes y la necesidad de definir un plan parta las Fuerzas Armadas.
Cambios en educación
La candidata de Juntos por el Cambio cuenta en “De un día para otro” que antes de lanzar su candidatura presidencial recorrió cuatro veces el país, de norte a sur y el diálogo con los vecinos de todas las provincias le permitió conocer sus inquietudes y los principales problemas que enfrentan. Así fue definiendo la agenda más urgente, que incluye la necesidad de que en la Argentina sea posible trabajar en paz y en orden y crear nuevas fuentes de empleo”. Y se explaya en el libro acerca del estancamiento de la educación, un tema que considera vital.
Anticipa que tomará como modelo la experiencia de Mendoza, una provincia gobernada por la coalición que la postula. “Toda la información sobre docentes y alumnos debe incluirse allí en el sistema GEM (Gestión Educativa Mendoza), una plataforma informática que excluye e invalida cualquier registro en papel.”, explica. Destaca que esta herramienta permite disponer “día a día de una estadística exacta del estado de la educación”
Y proyecta extender las herramientas digitales a otras áreas, lo que contribuiría a una mayor eficiencia del Estado. “Si, a su vez, esa red se integra con la que debería desplegarse para la atención de la salud, podría seguirse la historia de cada chico desde que nace hasta que termina el colegio secundario”, explica la candidata presidencial.}
Además de fortalecer los programas de capacitación docente, Bullrich planea también recurrir a la experiencia del gobierno de su adversario interno en las PASO: Horacio Rodríguez Larreta.
“Del gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires resultaría interesante tomar lo que se denomina Segundo boletín. Contiene toda la historia académica del secundario, los objetivos que cada alumno va cumpliendo en relación con las metas que debe alcanzar y los plazos para hacerlo. Por supuesto, a este boletín tienen acceso los alumnos y los padres, además de las autoridades escolares y gubernamentales”, explica.
Bullrich también propone cambios en los planes de enseñanza y la organización curricular en las escuelas.
“¿Por qué no permitir que en cuarto y quinto año del secundario los estudiantes puedan elegir una mayor carga de ciertas materias, en orden a su orientación vocacional?”, afirma en el libro.
Y añade que “hoy existen demasiadas materias y pocos conocimientos. Debemos volver a las materias medulares, las que entrenan las habilidades fundamentales de una persona, las que le enseñan a buscar, interpretar, comparar y resolver, hábitos que después serán necesarios para toda la vida”.
Bullrich presenta sus propuestas luego de publicar su anterior libro, “Guerra sin cuartel”, en el que dio cuenta de su trabajo como ministra de Seguridad de la Nación, entre 2015 y 2019.