Con un brindis en el hotel Sheraton de Retiro, Poder Ciudadano celebra esta noche los 40 años de democracia bajo la consigna “Proyectemos futuro”. Ante más de 500 invitados, el evento anual de la Fundación Poder Ciudadano, capítulo argentino de Transparencia Internacional, sentó posición sobre la necesidad de fortalecer los derechos fundamentales, las instituciones democráticas y el diálogo plural. Los principales oradores fueron el titular de Poder Ciudano, Hugo Wortman Jofré; el procurador General de la Nación, Eduardo Casal, y el juez de la Corte Suprema Ricardo Lorenzetti.
Wortman Jofré inició el evento con un discurso en el que llamó fortalecer a las instituciones. “Apoyando a quienes nos gobiernan y respetan el imperio de la ley y con una posición crítica con quienes se consideran por encima de ella”, remarcó.
En esa línea apuntó al particular transe que atraviesa el país y el marco de las elecciones presidenciales. “La elección de una elite gobernante o de un mesías con poderes supremos no es el camino apropiado, puesto que se estaría reduciendo la participación ciudadana a su mínima expresión y se atacaría la dignidad misma de todo ser humano, para fijar su proyecto de vida y decidir acerca de su destino”, dijo.
Advirtió que sistema republicano de frenos y contrapesos es el “mejor frente a los tiempos que se avecinan”, para señalar: “El gran desafío que tenemos por delante es el ejercicio de la tolerancia hacia ideas o programas que colisionan con nuestros ideales, con nuestra ideología o, incluso, con nuestros derechos”.
Del evento, organizado en el Salón Libertador del Sheraton Hotel and Convention Center de la Ciudad de Buenos Aires, participan autoridades de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de la nación, la ciudad y las provincias, además de personalidades del ámbito periodístico, de la academia, la sociedad civil y diplomáticos.
El discurso de Casal, a quien el kirchnerismo intentó correr de su puesto interino durante los últimos tres años, tuvo pasajes de alto voltaje político. Por ejemplo, cuando conminó a las “futuras autoridades políticas” a designar un Procurador General “para afirmar la institucionalidad del Ministerio Público Fiscal (MPF)”, aunque aclaró: “Tengo la convicción, la fuerza y un equipo cuya capacidad ha quedado bien demostrada, para seguir consolidando un organismo fundamental para la defensa de los valores más altos, como son la verdad y la justicia”.
Casal recordó no solo su ingreso a la Procuración, en 1987, y los cambios que se sucedieron hasta que en 2017 debió suplantar a Alejandra Gils Carbó, quien dimitió acorralada por el macrismo. Casal resaltó que entonces “se pensó una estrategia a corto plazo -en tanto un interinato nunca había excedido los 5 meses- que permitiese lograr que el Ministerio Público siguiera funcionando adecuadamente y que no se provocara una merma en las posibilidades de gestión de quién finalmente fuera designado como Procurador General de la Nación”.
“Luego de eso empecé a recibir cuestionamientos desde sectores políticos que en definitiva se tradujeron en la formulación de más de una docena de pedidos de juicio político en mi contra que, no obstante su fracaso por carecer de fundamentos, determinaron a partir de la infinidad de requerimientos a contestar, una sobrecarga en el esfuerzo del trabajo cotidiano que, además, como ya dije, se estaba desarrollando en una situación de extraordinaria dificultad”, añadió.
Aseguró que “se trató de un contexto hostil, en el que incluso se llegó a confundir mi esfera personal con la funcional, y en el que hacer efectiva la jubilación que ya tenía concedida aparecía como una opción a considerar”.
Y completó, en referencia a la avanzada del kirchnerismo: “Sin embargo, fue tan grande el compromiso demostrado por mi equipo de colaboradores en la defensa de la Institución, y el acompañamiento brindado por la mayoría de los integrantes del Ministerio Público, a los que debo sumar asociaciones civiles como la organizadora, los medios de comunicación que hacían llegar al común de la gente lo que acontecía, otras asociaciones nacionales e internacionales vinculadas a nuestra actividad, que opté por resistir esos embates. Bueno, no sé si es el término correcto. En realidad fue perseverar en el ejercicio de nuestra función”.
Entre los primeros en decir presente en el evento estuvieron el exministro de Justicia de Cambiemos Germán Garavano, el diputado de la Coalición Cívica Juan Manuel López, el camarista federal Mariano Llorens y Diego Barroetaveña, uno de los miembros de la Cámara de Casación Penal que debe decidir en la causa Hotesur y Los Sauces.
También el exministro de Educación del Frente de Todos Nicolás Trotta y los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola, que impulsaron la condena contra la vicepresidenta Cristina Kirchner. Al tiempo se sumaron los camaristas de la Casación Guillermo Yacobucci y Mariano Borinsky, los fiscales Carlos Stornelli y Eduardo Taiano, y el juez federal Sebastián Casanello.
La candidata a presidenta de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, llegó a las 20.30 junto a su marido, Guillermo Yanco, y el intendente de Capitán Sarmiento, Javier Iguacel. Bullrich es la única presidenciable presente en el evento, pese a que todos los postulantes fueron invitados. Aunque el ministro de Economía, Sergio Massa, no asistió, sí lo hizo su mujer, la titular de AySA, Malena Galmarini.
También fueron de la partida el empresario Daniel Vila y su mujer, Pamela David, lo mismo que el abogado, exministro de Seguridad y exjuez del Juicio a las Juntas, Carlos León Arslanian. Tribunal que compartió con otros dos asistentes, Jorge Valerga Aráoz y Ricardo Gil Lavedra, actual presidente del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal.
Durante el encuentro se proyectó el video “Nuestra democracia” y se otorgará un reconocimiento a Víctor Bugge, fotógrafo de Casa Rosada y testigo directo del período democrático más largo de la historia local al acompañar a las máximas autoridades del país desde el retorno de democracia, en 1983.