Sentado en una banqueta alta, y mientras por detrás suyo podía leerse la frase “potencia exportadora argentina”, el secretario de Industria, José Ignacio de Mendiguren se entusiasmaba detallando la inversión del Estado por “19.000 millones de dólares” ante empresarios de pymes cuando Sergio Massa lo corrigió al instante.
“Pesos, Vasco, 19.000 millones de pesos”, interrumpió el ministro de Economía y precandidato presidencial de Unión por la Patria (UP), con una ancha sonrisa y ante las miradas de un auditorio afin.
En una jornada en la que el dólar blue volvió a escalar, hasta ubicarse cerca de los $600 por unidad, Massa continuó con anuncios de mejoras para distintos sectores económicos y sociales, a efectivizarse luego de las cruciales internas del próximo domingo. El ministro-candidato, a pesar de la suba de la divisa estadounidense y de la inflación, espera ubicarse en las PASO como el candidato más votado y quedar bien posicionado para las generales de octubre, según describieron en su entorno.
“Estamos convencidos de que esta inversión tiene como objetivo lograr sacarnos de los shocks recurrentes, y fortalecer la capacidad de exportación argentina”, dijo Massa en el 9° piso del CCK, donde se reunió con unos 300 empresarios pyme, ya enrolados en el denominado programa Potencia PyMEx, preparado para empresas que “incorporan mejoras en sus procesos y sus productos para aumentar rápidamente sus exportaciones y llegar a más mercados”, según la gacetilla distribuida por el Ministerio de Economía.
Las mejoras para pymes se suman al posible pago de una suma fija, aún sin definiciones sobre el monto, para asalariados con bajos sueldos, según publicó hoy Clarín. Además, el anuncio de la semana pasada sobre el nuevo piso de pago del impuesto a las ganancias (subió a $700.000), el aumento de las jubilaciones y nuevos montos para el pago de los planes Potenciar Trabajo. Todas las medidas se harían efectivas después del test electoral, en el que Massa competirá contra Juan Grabois, en la interna de UP, pero, sobre todo, medirá fuerzas con Juntos por el Cambio y el libertario Javier Milei.
Serio y con paso firme, Massa llegó cuatro minutos antes de las 13 a la cúpula del CCK, junto a De Mendiguren. Escuchó complacido los elogios de Nilda Brovida y Sebastián Negri, dos empresarios que le agradecieron “por entendernos”, según expresó la primera de ellos. El secretario de Industria y ex titular de la Unión Industrial Argentina prometió: “En los dos próximos períodos presidenciales vamos a duplicar nuestras exportaciones y crear miles de nuevas empresas desde un Gobierno aliado con la producción y no con la especulación financiera.
“Al Fondo no le gustan estas cosas, tampoco le gusta el gasoducto”, dijo De Mendiguren, en una línea crítica que luego retomaría su jefe político. “Argentina está en la víspera de un momento extraordinario, pero se llega con producción, lejos de la especulación”, repitió.
Massa, que lo había escuchado mientras saboreaba una pastilla, apuntó al sector energético, la minería y el “valor agregado” como ejes de la recuperación de reservas, hoy en un punto crítico. “El mayor esfuerzo hay que ponerlo en aumentar un 10 por ciento nuestras exportaciones pyme hacia fin de año”, sostuvo el ministro y candidato, y puso los ejemplos de Italia, Croacia y Polonia, “países europeos cuya base de crecimiento es el entramado de las pymes”. Enfatizó la necesidad de dar “financiamiento en tasa subsidiada” para aumentar las exportaciones, que “tiene que ser una decisión sostenida en el tiempo, porque no es un problema de una empresa, ni de un sector, es la solución que necesita nuestro país”.
En tren de proponer un futuro sin crisis cambiaria, y mientras el dólar continuaba su suba, Massa afirmó: “Si exportamos más de lo que importamos, si lo hacemos con valor agregado y no primarizado, si abrimos nuevos destinos y cumplimos nuestros contratos en el mundo, seguramente esas crisis recurrentes alrededor de los tipos de cambio, de los cepos, no van a existir más”. Y aseguró que, por ese camino, se logrará “salir de las restricciones, bajar la inflación y sacarnos de encima a aquellos que nos condicionan nuestra autonomía económica sobre la base de un préstamo que no sirvió para sostener la producción”, en referencia crítica al préstamo otorgado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) al gobierno de Mauricio Macri.
Luego de sus nueve minutos de discurso, Massa se prestó a la foto grupal, que la locutora del evento organizó al instante. Salió sin hablar con la prensa hacia San Martín, otro mojón del ajetreado sprint final de campaña, con promesas de un futuro mejor mientras el presente de la economía aparece lleno de complicaciones y desafíos.