La UIF y la AFIP, dos organismos que dependen del Gobierno, se sumaron a lo pedido por el fiscal Guillermo Marijuan y solicitaron también el sobreseimiento de Cristina Kirchner en la causa de los millones de dólares lavados por Lázaro Báez.
El caso contra la vicepresidenta quedó así sin acusadores y todo indica que su cierre es inminente. Cuando recibió el pedido de sobreseimiento del fiscal, el juez federal Sebastián Casanello lo envió a la UIF y la AFIP para ver si ellos sostenían la acusación, pero no lo hicieron.
La semana pasada, Marijuan, que había imputado a Cristina Kirchner en esta causa, entendió que no había pruebas de que ella estuviera relacionada con el lavado de dinero por el que Báez fue condenado a 10 años de prisión. Dijo que a pesar de las relaciones entre ambos, los negocios en común y las centenas de contactos telefónicos entre ellos y sus entornos, no hay evidencia de que la vicepresidenta fuera coautora o partícipe del delito de lavado.
Se basó en un fallo de la Cámara de Casación que sostiene que Báez lavó dinero, pero que esa plata, unos 60 millones de dólares, provinieron de la evasión fiscal y no de las obras públicas con sobreprecios que recibió del kirchnerismo y por lo cual Cristina Kirchner fue condenada. Con es fallo que corta el lazo entre la causa Vialidad y el dinero de Báez, Marijuan entendió que no hay evidencia contra la vicepresidenta.
La UIF había sido el organismo que durante el gobierno de Macri sostuvo que Cristina Kirchner debía ser indagada.