El exministro de Economía Jorge Remes Lenicov aseguró que se necesita un gran acuerdo político para superar la crisis actual y puso como ejemplo el consenso al que llegaron Eduardo Duhalde y Raúl Alfonsín en la crisis de 2001. “Había confianza, más allá de las conversaciones previas”, dijo en LN+.
El autor de 115 días para desarmar la bomba rememoró la forma en la que se hizo cargo del Palacio de Hacienda cuando el peronista Eduardo Duhalde llegó a la presidencia, designado por la Asamblea Legislativa. Entonces, hubo contactos con el radicalismo, que estaba liderado por el expresidente Raúl Alfonsín.
Remes Lenicov contó que Duhalde le propuso asumir el 30 de diciembre y que de inmediato lo citó a una reunión en su casa a la que iban a asistir Alfonsín con su exministro de Economía Juan Sorrouille. “Fui a la casa y estábamos los cuatro”, recordó en Odisea Argentina, el programa conducido por Carlos Pagni.
“Duhalde me pidió entonces que le explicara lo que iba a hacer. Lo hice en unos diez minutos. Y después de eso, Afonsín le preguntó a Sorrouille si estaba de acuerdo. Y él asintió”, sostuvo. Y añadió: “Nos levantamos, nos dimos la mano y punto. Ese fue el acuerdo. Duró 20 minutos”.
Remes Lenicov precisó que por entonces “había confianza” entre los espacios y enfatizó que “la palabra valía”. “Algunos puntos de las leyes que enviábamos al Congreso, lo arreglábamos antes por teléfono con los radicales. Eso no está ahora”, observó.
El exministro contó que ya había recibido, meses antes de la crisis, un ofrecimiento para sumarse al Gobierno. Le habían propuesto que fuera al Banco Central. “Cuando pregunté si era para salir de la convertibilidad, me dijeron que no. Entonces, respondí que no había nada que hablar”, sumó.
Meses después, ya con la conducción del Ministerio de Economía, Remes Lenicov pudo implementar las medidas económicas que buscaba y lo hizo con el apoyo de la oposición. Precisó en que para superar la crisis se necesita un programa de gobierno, unicidad en la política económica y acuerdos políticos.
Sin embargo, lamentó que en la actualidad no existe un escenario para llegar a ese consenso. “Uno siente tristeza y bronca, no hemos aprendido anda. La política ve a la economía con un sentido voluntarista y mágico. Nunca se discuten los instrumentos”, señaló.
Remes Lenicov puso de manifiesto que Juntos por el Cambio y el Frente de Todos “ni siquiera se saludan”. “Se ha llegando a un nivel de lucha fratricida. Se pelean, se hablan mal”, criticó. “En el siglo pasado, en el peronismo, donde militaba, la relación con los radicales era súper normal. Nunca hubo insultos”, añadió.
No obstante, no descartó que puedan darse las condiciones a futuro para que haya un diálogo entre las principales fuerzas políticas que permitan consensos mínimos. “Creo que el miedo disciplina. Todo lo que hicimos, y ese acuerdo, fue porque estábamos al borde del precipicio”, subrayó.