El escalador de Nepal Kami Rita Sherpa alcanzó este miércoles la cumbre del Everest por 27ª vez, lo que le otorga el récord por el mayor número de subidas a la montaña más alta del mundo. “La gente piensa que romper récords es lo único que importa, pero para mí nunca fue acerca de los récords”, reflexionó el hombre que empezó su aventura hace 28 años en 1994.
“Alcanzó exitosamente la cumbre esta mañana al guiar a un escalador vietnamita”, dijo Mingma Sherpa, de la empresa Seven Summit Treks. El hombre de 53 años había alcanzado el récord en 2018, cuando hizo su subida número 22 al Everest.
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Sin embargo, el nepalí se propuso subir una vez más la montaña después de que otro escalador llamado Pasang Dawa Sherpa, de 46 años, igualara la marca con 26 subidas el domingo. Tras más de dos décadas como guía, Kami Rita Sherpa escaló por primera vez los 8848 metros de la cumbre en 1994 cuando trabajaba para una expedición comercial.
Desde entonces subió el Everest casi todos los años, a menudo encabezando el primer equipo que ata las cuerdas para abrir el camino al punto más alto del planeta.
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“Estas marcas fueron alcanzadas no con la intención de hacerlas, sino como parte de mi trabajo como guía”, declaró Sherpa en abril cuando se dirigía al campamento base. Conocido como “el hombre del Everest”, Sherpa nació en 1970 en Thame, una aldea de las Himalayas de donde han salido varios escaladores exitosos.
El testimonio de Kami Rita
“Parece que fue ayer cuando empecé a hacer montañismo, un niño pequeño de la aldea, que desconocía sus propias habilidades, comenzó este viaje sin el conocimiento adecuado. La única cosa que conocía y eligió era escalar por sí mismo y por su familia, pero poco sabía que él no era el que eligió esas montañas, pero las montañas lo eligieron a él.
Hoy, casi después de más de dos décadas de mi carrera de montañismo, después de 28 años de mi primera cumbre, me di cuenta de lo afortunado que soy de estar en este camino, de ayudar a otros a conquistar sus sueños, de ayudar a todos mis clientes para su cumbre. Hasta la fecha de hoy he ayudado a cientos de extranjeros (amigos) a llegar a la cima de la cumbre y a llevarlos de vuelta a sus hogares sin ninguna de esas víctimas. Incluso si se hace arriesgando mi propia vida.
A veces se pone difícil, especialmente cuando ya tienes 52 años y todavía estás conquistando esas montañas. Pero todavía tengo algo de sangre joven cuando se trata de escalar. Me da fuerza cuando siento que las montañas están llamando.
Hay un montón de récords batidos estos días. La gente piensa que romper récords es lo único que importa, pero para mí nunca fue acerca de los récords al principio era mi necesidad de ganar para los vivos y cuando el tiempo se movió escalando se convirtió en mi pasión, yo simplemente fui con la corriente que no me di cuenta que era haciendo un disco histórico. Después de todo esto, todavía siento y tomo la escalada como mi pasión. Y también les deseo a mis otros compañeros escaladores todo lo mejor para sus registros. Ya llegarás a eso”.