La decisión de María Eugenia Vidal de declinar su candidatura presidencial y de correrse al costado en la disputa por la jefatura de gobierno porteña envalentonó a los candidatos de Pro que compiten por la sucesión de Horacio Rodríguez Larreta en la ciudad de Buenos Aires. Tanto Jorge Macri como Fernán Quirós anticipan que correrán la carrera hasta el final e incluso no descartan que la disputa se dirima finalmente en las primarias de Juntos por el Cambio si ambos llegan parejos en las encuestas a la hora de presentar las listas, en junio próximo.
Esta posibilidad -que Pro compita dividido en las primarias de agosto- sería la mejor noticia que podría recibir Martín Lousteau, el candidato de la UCR a destronar al macrismo de la ciudad. Justamente por ese riesgo es que tanto Mauricio Macri como Rodríguez Larreta habían acordado que Pro presentara un único candidato a las PASO. Sin embargo, es tal la intensidad que adquirió en las últimas semanas la disputa entre Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich por la candidatura presidencial de Pro que nadie descarta por estas horas que este compromiso quede en la nada. Incluso ante al peligro de perder el control de la ciudad.
Quirós y el respaldo de Larreta
El choque de trenes parece inexorable. Detrás de la locomotora de Jorge Macri se ubican Bullrich y su primo Mauricio. Ambos expresaron que prefieren al actual ministro de gobierno porteño como sucesor de Larreta. La foto de Bullrich junto a Jorge Macri selló ese pacto. Larreta, que hasta entonces se mostraba equidistante, lo tomó como una señal de guerra y ordenó a los suyos cerrar filas detrás de Quirós. A partir de ahora toda la estructura y los equipos técnicos de la ciudad se pondrán a disposición de su ministro de Salud. El respaldo será inequívoco.
“Vamos a fortalecer todo lo posible la candidatura de Fernán. Estamos convencidos de que tenemos al mejor candidato para la ciudad y que tiene todo el potencial para crecer en estas semanas que restan hasta la presentación de las listas”, enfatizan los laderos de Larreta.
La decisión del jefe de gobierno porteño de respaldar a Quirós tensiona al máximo la relación con Mauricio Macri y Bullrich.
“Horacio está decidido a jugar a fondo. Bullrich y Mauricio pusieron todas sus fichas a que Jorge sea el candidato único de Pro; Horacio no está dispuesto a entregarles ese triunfo por anticipado. Hacerlo sería interpretado como una señal de debilidad suya. Por eso ordenó bancar ‘con todos los fierros’ a Fernán”, explican en el larretismo.
La decisión se tomó el jueves pasado en una reunión reservada entre Quirós y la plana mayor del gabinete porteño, encabezada por Felipe Miguel, jefe de gabinete de Larreta y hombre de su máxima confianza. Allí estaban la ministra de Educación Soledad Acuña -quien declinó su candidatura porteña y se baraja como posible compañera de fórmula de Quirós-; Eugenio Burzaco (Seguridad), María Migliore (Desarrollo humano y Hábitat), Eduardo Macchiavelli (secretario de Proyección Federal), Martín Mura (Hacienda), Enrique Avogadro (Cultura) y Federico Di Benedetto (secretario de Comunicación y estratega de Larreta).
En las filas de Jorge Macri anticipan que darán la batalla, aún sin el apoyo de la estructura de la ciudad. Aseveran que las encuestas lo muestran con amplia ventaja frente a sus rivales, no solo Quirós sino incluso frente a Lousteau.
“A nosotros no nos cambia la estrategia el corrimiento de Vidal ni el apoyo de Larreta a Quirós. Vamos a competir hasta el final”, aseveran en la trinchera del ministro de gobierno porteño.
En el entorno de Quirós admiten que corren por detrás de Macri en las encuestas. “Pero Jorge empezó hace un año y medio atrás su campaña. Fernán todavía no arrancó. Y creemos que tiene un gran potencial: tiene un 90% de conocimiento en la ciudad y le hizo frente a la pandemia”, confían.
¿Qué sucederá si, pese a contar con todo el apoyo de la estructura porteña, Quirós finalmente no levanta vuelo? ¿Declinará su postulación para que haya un solo candidato de Pro en las primarias de Juntos por el Cambio?
En el entorno del médico prefieren contestar dentro de un mes y medio, cuando se acerque la fecha que marca el calendario para la presentación de listas. “Si las mediciones vienen parejas, no descartamos que haya dos candidatos en las primarias”, se envalentonan.
Lousteau, mientras tanto, se refriega las manos. Único candidato de la UCR, el actual senador confía el voto duro que supo consolidar en la ciudad para destronar al macrismo. Si llega dividido a la compulsa, mejor todavía, confía.